Un jurado de Nueva York encontró este miércoles a Harvey Weinstein culpable de agresión sexual en primer grado contra Miriam Haley, una antigua asistente de producción que lo acusó de haberla forzado a practicarle sexo oral en 2006.

La sentencia, que podría suponer una pena máxima de 25 años de cárcel, marca un nuevo capítulo en la saga legal que ha perseguido al exproductor durante años.

Weinstein, de 73 años, ya había sido condenado en 2020 a 23 años de prisión por otros delitos similares, pero esa sentencia fue revocada en una revisión reciente debido a un error procesal.

Ahora, enfrenta un proceso que ha estado lleno de tensiones, amenazas y polémicas que han puesto en jaque la integridad del sistema judicial.

El proceso judicial ha estado marcado por episodios de alta tensión, incluyendo amenazas de violencia y acusaciones de presiones internas dentro del jurado.

El presidente del jurado reportó amenazas a su integridad física apenas una hora antes de la lectura de los veredictos, lo que llevó a una audiencia privada con el juez Curtis Farber, fiscales y la defensa de Weinstein.

Según explicaciones oficiales, al menos un miembro del jurado habría amenazado con violencia física, diciendo frases como 'te veré afuera en algún momento'.

Esto generó un ambiente de incertidumbre y tensión que estuvo presente durante todo el juicio.

En medio de este caos, Weinstein, que ha estado recluido en la prisión del hospital Bellevue en Nueva York debido a problemas de salud como leucemia y afecciones cardíacas, se mostró calmado desde su silla de ruedas, escuchando los veredictos.

Desde el inicio del proceso, Weinstein ha reclamado un juicio justo y ha pedido que se anule el actual y que se nombre un nuevo jurado para un posible nuevo proceso.

El productor ha sido una de las figuras más controvertidas de Hollywood, con una carrera que abarcó décadas y que estuvo marcada por acusaciones de acoso y agresión sexual que comenzaron a salir a la luz en 2017, en medio del movimiento #MeToo.

El caso contra Weinstein incluye también acusaciones de otras víctimas, como Jessica Mann, quien afirmó haber sido violada por el productor en un hotel de Nueva York en 2013.

Además, la modelo polaca Kaja Sokola también denunció que Weinstein la obligó a practicarle sexo oral en 2006, sumándose a la lista de víctimas que buscan justicia después de años de silencio.

La historia de Weinstein en Hollywood se remonta a los años 80 y 90, cuando fue uno de los productores más influyentes y poderosos, responsable de éxitos como