Supuestamente, la trágica muerte de Esther Gabriela Murillo Cruz, conocida exreina de belleza y modelo ecuatoriana, ha conmocionado a toda la comunidad en Manta y al país en general.

La joven, que había sido coronada en diversos certámenes nacionales, perdió la vida en la madrugada del sábado 26 de julio, en un suceso que aún está siendo investigado por las autoridades locales.

Según informes del medio local Extra, el ataque ocurrió aproximadamente a las 3:00 a.m., cuando Murillo Cruz se encontraba dentro de un vehículo en compañía de un hombre identificado como Jesús Steven L. A., de 30 años, y un bebé de menos de un año de edad. Testigos presenciales y agentes policiales relataron que varios individuos armados interceptaron el automóvil y abrieron fuego contra sus ocupantes, para luego escapar rápidamente del lugar en motocicletas.

Supuestamente, el tiroteo fue extremadamente violento y causó heridas de gravedad en la joven, quien fue trasladada de urgencia al hospital del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS).

Lamentablemente, Murillo Cruz no logró superar las heridas y falleció en el centro médico. Hasta ahora, no se han dado detalles oficiales sobre el estado del hombre que la acompañaba ni del menor, lo que aumenta la incertidumbre en torno a las circunstancias del crimen.

Supuestamente, la exreina de belleza había sido una figura pública muy reconocida en el ámbito de los certámenes de belleza en Ecuador. En 2016, fue coronada como Reina del Comercio, y un año después obtuvo el título de Reina de Pedernales, además de participar en el certamen para elegir a la Reina de Manabí.

En 2018, fue distinguida como Reina del Folklore de Manabí, consolidando su presencia en el mundo de los concursos de belleza.

La investigación, supuestamente dirigida por las autoridades locales, busca esclarecer los motivos que llevaron a este ataque y dar con los responsables.

El crimen ha generado una creciente preocupación en la ciudadanía, ya que refleja la alarmante violencia que afecta a varias ciudades del país. Además, el hecho ha reavivado el debate sobre la inseguridad y la necesidad de fortalecer las medidas de protección en Ecuador.

Supuestamente, algunos analistas sugieren que estos hechos violentos podrían estar relacionados con conflictos de índole personal o incluso con actividades ilícitas que se desarrollan en la región.

Sin embargo, las investigaciones todavía están en curso. La comunidad y los familiares de la víctima exigen justicia y mayor seguridad para evitar que tragedias como esta se repitan, mientras que las autoridades prometen trabajar arduamente para esclarecer el caso y capturar a los responsables.

La pérdida de Esther Murillo Cruz deja una profunda tristeza en quienes la conocían y en el país entero, que la recuerda por su belleza, carácter y su contribución a la cultura local.