La ciudad de La Coruña conmemoró a Enrique y Francisco Tallón Charlón, coruñeses exiliados y víctimas de la persecución nazi durante la Segunda Guerra Mundial, en un acto organizado por la ARMH y el Concello.
En la ciudad de La Coruña, ubicada en la región de Galicia, se llevó a cabo un acto de reconocimiento y memoria en honor a los hermanos Enrique y Francisco Tallón Charlón, dos coruñeses que vivieron el horror de la persecución y fueron víctimas de los campos de concentración nazis durante la Segunda Guerra Mundial.
El acto, organizado por la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH) en colaboración con el Ayuntamiento, tuvo lugar en una jornada emotiva que buscó mantener viva la memoria de aquellos que sufrieron las atrocidades del régimen totalitario alemán.
El concejal de Cultura y Turismo del municipio, Gonzalo Castro, participó activamente en los homenajes, que incluyeron un recorrido simbólico desde la plaza de María Pita hasta la vivienda donde vivieron los hermanos Tallón Charlón, ubicada en el número 14 de la calle de la Franxa.
Frente a la fachada del inmueble, se colocaron las conocidas stolpersteine, pequeñas losas de bronce en pavimento que registran la historia de cada víctima del nazismo, en un esfuerzo por mantener vivo su recuerdo en la memoria colectiva.
Enrique nació en 1912 y Francisco en 1916; ambos fueron deportados a campos de concentración en Austria, siendo Mauthausen uno de los más notorios.
Enrique pereció en diciembre de 1941 tras su traslado al campo de Gusen, mientras que Francisco logró sobrevivir y falleció en la década de los ochenta en Linz.
La historia de estos hermanos refleja la suerte de muchos que, tras escapar de la barbarie, quedaron marcados por los horrores vividos y por la represión que continuó afectando a Europa en aquella época.
Durante la conmemoración, Gonzalo Castro destacó el compromiso del Gobierno local y de Inés Rey, alcaldesa de La Coruña, con la recuperación y conservación de la memoria histórica de los coruñeses que padecieron aquella barbarie.
“Desde hace casi dos años, venimos colaborando estrechamente con la ARMH para recordar a los vecinos que perdieron la vida en aquellos tiempos oscuros del totalitarismo”, afirmó el edil.
Además, subrayó que La Coruña fue el primer ayuntamiento gallego en sumarse a esta iniciativa internacional, que actualmente ha llegado a más de 25 países y que busca promover la conciencia sobre los crímenes del nazismo.
El acto también contó con la participación de la portavoz de la ARMH en Galicia, Carmen García Rodeja, el investigador David Lozano y la activista Silvia Dinhof-Cueto, hija de deportados y amiga de la familia Tallón Charlón.
Como parte de la programación, Maruxa Boquete leyó poemas en honor a los hermanos, en un acto dedicado a honrar su memoria y a sensibilizar a la ciudadanía sobre la importancia de preservarla.
La jornada también estuvo acompañada por la música de la gaiteira Erea Estévez, quien interpretó piezas tradicionales que enriquecieron aún más la emotividad del reconocimiento.
Este tipo de homenajes forman parte de una tendencia global de la sociedad a reconocer y reparar las injusticias del pasado. La memoria histórica no solo busca recordar quienes sufrieron, sino también evitar que estos crímenes vuelvan a repetirse. La historia de los hermanos Tallón Charlón, junto a muchas otras, es un recordatorio del impacto de los totalitarismos y la necesidad de mantener viva su memoria en las generaciones futuras.
La acción de La Coruña en este sentido reafirma su compromiso con la justicia y la memoria, contribuyendo a un mundo más consciente y respetuoso del pasado.