El delantero neerlandés Memphis Depay genera malestar en Brasil tras faltar sin previo aviso a un entrenamiento del Corinthians, en medio de tensiones por pagos pendientes y su compromiso con el club.

En Brasil se ha desatado una ola de críticas y preocupación en torno a Memphis Depay, quien supuestamente faltó sin aviso a un entrenamiento clave del Corinthians, uno de los clubes más populares y tradicionales del país.

La actitud del neerlandés ha generado malestar en la afición y en la directiva, que consideran que su comportamiento evidencia una falta de compromiso con el equipo.

El incidente ocurrió en medio de una situación financiera complicada para el club paulista. Según informes de medios locales, el Corinthians le adeudaría aproximadamente 4.700 euros en concepto de bonificaciones y otros conceptos contractuales, dinero que supuestamente no ha sido abonado en tiempo y forma. Además, se ha reportado que la institución se atrasó en pagos a jugadores, personal y a la empresa responsable de gestionar la seguridad del jugador en Brasil.

Todo esto en un contexto donde el club atraviesa dificultades económicas, presuntamente agravadas por la pandemia y la crisis económica en el país.

De acuerdo con fuentes cercanas, Depay se ausentó durante la práctica dirigida por el técnico Dorival Junior y, presuntamente, se declaró en rebeldía, sin ofrecer justificación alguna.

La situación se ha convertido en un tema de conversación en las redes sociales y en la prensa deportiva, donde muchos analistas cuestionan la actitud del futbolista, quien supuestamente ha tenido un rendimiento discreto desde su llegada en 2024, sumando solo seis goles y diez asistencias en 28 partidos oficiales.

Supuestamente, la relación entre Depay y el club no atraviesa su mejor momento. En Brasil, algunos críticos apuntan a que, pese a su talento, el neerlandés no ha logrado conectar emocionalmente con la hinchada ni con la cultura del club, que se caracteriza por su pasión y entrega.

Uno de los exjugadores y comentaristas, Walter Casagrande, declaró en un programa de radio que "Memphis no tenía mercado en Europa y, al llegar a Brasil, vino sin una verdadera motivación, solo por un contrato millonario que le cayó del cielo."

Casagrande también afirmó que "el contrato de Depay fue uno de los más caros en la historia del Corinthians, algo que ni siquiera Maradona en Napoli o Messi en Barcelona tuvieron en sus mejores épocas, y eso genera una expectativa que él no ha sabido cumplir".

Agregó que "el club siempre ha sido un equipo del pueblo, y su mayor problema es la falta de ese amor y compromiso que se requiere para triunfar en Brasil."

Por su parte, la directiva del Corinthians emitió un comunicado en el que afirmó que Depay justificó su ausencia y expresó su deseo de seguir en el club.

La presidencia del equipo, supuestamente, consideró que el asunto está cerrado tras las medidas tomadas y las explicaciones del jugador. Sin embargo, la tensión persiste y la relación entre el futbolista y la institución parece estar en un punto crítico.

El atacante, que llegó con altas expectativas, aún puede aportar en el terreno de juego, como lo ha demostrado con su contribución en goles y asistencias, pero su actitud y compromiso siguen siendo tema de debate en Brasil.

La situación de Memphis Depay en el Corinthians se ha convertido en un ejemplo de cómo las expectativas económicas y deportivas pueden chocar, generando controversia y cuestionamientos sobre el verdadero compromiso de los futbolistas en clubes con historia y pasión como el Corinthians.