El entrenador chileno fue homenajeado por los hinchas del Málaga en su reencuentro con el club, aunque el partido terminó con una derrota y una lesión preocupante para Isco.

Manuel Pellegrini fue recibido con una ovación de pie por los aficionados del Málaga en su regreso a La Rosaleda, en un partido amistoso previo al inicio de la temporada en Europa.

El estratega chileno, considerado uno de los entrenadores más destacados del fútbol sudamericano y europeo, fue homenajeado por la afición local que rememoró los mejores momentos de su paso por el club entre 2010 y 2013.

Durante esa etapa, Pellegrini logró llevar al Málaga a una posición histórica en La Liga, alcanzando un cuarto lugar que le permitió clasificar a la UEFA Champions League, y llegando hasta los cuartos de final de la prestigiosa competición europea, un logro que aún es recordado por los seguidores del equipo.

El ambiente en La Rosaleda fue emotivo: la multitud coreaba su nombre con entusiasmo, y en las gradas se desplegaron banderas y pancartas en honor al técnico chileno.

La escena fue una muestra del cariño que aún le profesan los hinchas del Málaga, quienes consideran a Pellegrini uno de los personajes más importantes en la historia del club.

Algunos expertos en fútbol apuntan que la influencia del 'Ingeniero' en el desarrollo del equipo y en la consolidación del talento local fue fundamental para el crecimiento del club en aquella época.

No obstante, el partido no fue solo un momento de celebración. El Málaga, dirigido por Pellegrini en ese momento, enfrentó al Real Betis en un encuentro amistoso que sirvió como preparación para la temporada europea.

El resultado final fue una derrota para los béticos por 3-1, en un partido marcado por la intensidad y algunos incidentes. El primer gol del partido fue anotado por Larrubia en los primeros minutos, poniendo en ventaja al equipo local. Luego del descanso, Málaga logró una remontada impresionante en apenas un minuto: Larrubia volvió a marcar, seguido por un gol de Chupe, que puso el marcador en 3-0.

Por su parte, el Betis logró reducir la diferencia con un cabezazo de Hernández, aunque ya era demasiado tarde para una remontada. Sin embargo, el encuentro estuvo marcado por un incidente preocupante: Isco, jugador del Betis, sufrió un paro cardiorrespiratorio en el minuto 2 y tuvo que abandonar el campo en ambulancia, con muletas, generando gran preocupación entre los asistentes.

Los servicios médicos atendieron rápidamente a Isco, y se supo que fue trasladado a un centro hospitalario, aunque se desconoce aún la gravedad de su lesión.

El partido también quedó marcado por un retraso de 17 minutos al inicio, debido a la atención de un aficionado que sufrió un paro cardíaco en las gradas.

La rápida intervención de los paramédicos permitió estabilizarlo y trasladarlo con pulso estable. Este incidente recordó la importancia de contar con servicios médicos adecuados en los eventos deportivos.

Supuestamente, este amistoso fue solo el comienzo de una serie de preparativos para ambas instituciones, que buscan fortalecer sus plantillas antes del inicio oficial de las competiciones.

La presencia de Pellegrini en Málaga sigue siendo un símbolo de éxito y reconocimiento, y su regreso al estadio ha sido considerado un momento histórico en la historia del club.

Mientras tanto, la atención se centra en la recuperación de Isco, cuya lesión ha generado inquietud en el mundo del fútbol, y en cómo afectará esto a su equipo en los próximos partidos.

En definitiva, la jornada en La Rosaleda quedó marcada por el homenaje a Pellegrini y las emociones que dejó el encuentro, un recordatorio del impacto que puede tener un entrenador en la historia de un club y en la pasión de sus seguidores.