Tras varios días de incertidumbre y especulaciones, este sábado se oficializó que Gennaro Gattuso será el nuevo entrenador de la selección italiana, reemplazando a Luciano Spalletti.

La confirmación vino de la mano de Gianluigi Buffon, uno de los íconos del fútbol italiano y parte del staff de la Azzurra, quien anunció que el exmediocampista llegará al banquillo del combinado nacional.

Buffon expresó en una rueda de prensa: "Hemos trabajado arduamente, ahora solo nos quedan los últimos detalles por ajustar. El presidente y toda la Federación han tenido unos días muy intensos, llenos de decisiones cruciales y momentos de alta tensión. Creo que, al final, hemos optado por la mejor opción para el futuro de la selección".

Dentro de las opciones que barajaba la federación italiana estaban nombres como Daniele De Rossi, Fabio Cannavaro y Gennaro Gattuso. Sin embargo, fue este último quien finalmente se impuso, considerando su experiencia y conocimiento del fútbol italiano y europeo. Según informó el medio Marca, Claudio Ranieri, otro de los nombres en la lista, rechazó la oferta debido a sus compromisos como asesor del club AS Roma.

Gattuso llega a la selección tras finalizar su contrato con el Hajduk Split de Croacia, club en el que estuvo en los últimos meses. Como futbolista, Gattuso tuvo una carrera destacada, defendiendo los colores del Milan durante muchos años y logrando numerosos títulos, incluyendo la UEFA Champions League en 2003 y 2007.

Como entrenador, su trayectoria no ha sido tan exitosa, con pasos por clubes como Sion, Palermo, OFI Creta, Pisa, Nápoles, Valencia y Marsella, aunque sin alcanzar grandes logros en todos ellos.

Es importante recordar que la selección italiana atraviesa un momento complicado, ya que no logró clasificarse para las últimas dos Copas del Mundo, eliminaciones que generaron preocupación en el país.

Actualmente, en las Eliminatorias de la UEFA, los resultados de la Azzurra no son los esperados y existe la posibilidad de que puedan quedar fuera de la próxima fase de mundiales, lo que hace aún más urgente un cambio en la dirección técnica.

En cifras, Gattuso llega a la selección con un contrato que, en euros, se estima en alrededor de 2 millones, y busca revertir la tendencia negativa, devolverle la competitividad y recuperar la confianza de los aficionados italianos.

La federación ha puesto en sus manos la responsabilidad de liderar una renovación que pueda devolver a Italia a los primeros planos del fútbol internacional, en un momento en que la historia y la tradición del país demandan resultados inmediatos y contundentes.

Este nombramiento marca un capítulo importante en la carrera de Gattuso, quien, a pesar de los altibajos, sigue siendo una figura respetada en el fútbol mundial.

La expectativa ahora está en ver cómo implementará su estilo y qué cambios introducirá para sacar adelante a la selección italiana en sus próximos compromisos internacionales.