La selección femenina sub-17 de Canadá aseguró su liderazgo en el Grupo D tras derrotar a Francia 2-1 en Marruecos, avanzando con autoridad a los octavos de final del Mundial en Salé.

El equipo femenino sub-17 de Canadá logró una victoria crucial al vencer 2-1 a Francia en su último partido del Grupo D en el Mundial FIFA en Marruecos, asegurando así su posición en la cima del grupo en la fase de grupos del torneo.

El encuentro se disputó en la Academia de Fútbol Mohammed VI, ubicada en Salé, donde Canadá mostró un rendimiento sólido y estratégico. La joven selección canadiense, que previamente había conseguido victorias contundentes contra Nigeria (4-1) y Samoa (6-0), aseguró su clasificación a la siguiente ronda con un rendimiento que refleja el crecimiento del fútbol femenino en Canadá, un país con una historia relativamente reciente en esta disciplina pero que ha ido ganando prestigio en los certámenes internacionales.

La primera parte fue dominada por Canadá, que abrió el marcador a los 14 minutos con un gol de Melisa Kekic, quien remató desde cerca tras un saque de esquina que las francesas no supieron despejar.

Este tanto fue un gran impulso para las canadienses, quienes mostraron una mejor disposición técnica y táctica. Francia, por su parte, intentó reaccionar, pero se encontró con una defensa sólida y una portera en excelente forma.

En la segunda mitad, Francia presionó en busca del empate y logró reducir la diferencia en el minuto 63 mediante un gol de Lea Morissaint, quien culminó una jugada con una potente definición.

Sin embargo, Canadá no se rindió y resistió los ataques franceses, logrando ampliar la ventaja tras un desafortunado gol en su propia puerta en el minuto 53.

La jugadora canadiense Reed Tingley envió un centro desde la banda, que fue desviado de manera desafortunada por la defensa gala, marcando un autogol que puso a Canadá en ventaja nuevamente.

Este resultado también estuvo marcado por la expulsión de Tingley en los minutos finales. La jugador reemplazante, que había sido clave en la generación de la segunda anotación, vio la tarjeta roja por una falta involuntaria en la línea de banda en el minuto 86, lo que generó cierta tensión en el partido y fue un contratiempo para su equipo.

Canadá cerró la fase de grupos con un total de 9 puntos, producto de sus triunfos ante Nigeria, Samoa y Francia, y con una diferencia de goles de +9.

Francia quedó en segunda posición con 6 puntos, tras su derrota frente a Canadá y las victorias previas ante Samoa y Nigeria.

Este logro no solo confirma el avance del fútbol juvenil femenino en Canadá, sino que también les permite evitar enfrentarse en los octavos de final contra España, defensor del título en 2018 y campeona en 2018 y 2022.

Los rivales de Canadá serán los terceros mejores clasificados de grupos B, E o F, en una fase que promete ser muy competitiva.

Cabe destacar que, en la historia del Mundial Sub-17 femenino, Canadá ha tenido participaciones destacadas, alcanzando los cuartos de final en 2018 y habiendo competido en varias ediciones desde 2008.

El torneo en Marruecos, que se extenderá hasta el 8 de noviembre, además de proporcionar una plataforma para el desarrollo de estas jóvenes talentos, también es un reflejo del crecimiento exponencial del fútbol femenino a nivel global, impulsado por esfuerzos en todo el mundo para visualizar y promover el deporte en la próxima generación.

El triunfo de Canadá en Marruecos podría marcar un punto de inflexión para el fútbol juvenil femenino en el país norteamericano, despertando un mayor interés y generando futuras estrellas que podrían brillar en competiciones mayores en los próximos años.

El torneo también aporta un panorama internacional donde la historia deportiva de países como Corea del Norte, que ha sido campeón en tres ocasiones, sigue siendo relevante, igual que las destacadas actuaciones de España y otras selecciones tradicionales.

En conclusión, con un rendimiento que combina rapidez, técnica y un espíritu de lucha, las jóvenes futbolistas canadienses han dado un paso importante en su carrera, mostrando que el país está en el camino correcto para convertirse en uno de los referentes del fútbol femenino a nivel mundial.