La celebración del título del Chelsea en el Mundial de Clubes 2025 dejó una imagen que rápidamente se volvió viral y generó numerosas opiniones en las redes sociales.

Supuestamente, el evento ocurrió en diciembre de 2025, cuando el equipo inglés logró coronarse campeón tras una emocionante final. Lo que llamó la atención fue la presencia del expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien fue invitado por la FIFA al partido y posteriormente participó en las actividades de premiación.

Según informes, el mandatario fue invitado a asistir al encuentro como parte de una iniciativa para promover el deporte a nivel global y fortalecer relaciones internacionales a través del fútbol.

La FIFA supuestamente buscaba incluir a figuras políticas de renombre para dar mayor protagonismo a la final. Después del partido, durante la ceremonia de premiación en la que el Chelsea recibió el trofeo, Trump fue invitado a subir al escenario junto a los jugadores y oficiales del equipo.

Lo que sorprendió a todos fue que, en un momento en que habitualmente las autoridades se retiran para dejar que los campeones disfruten de su celebración, Trump presuntamente desoyó la invitación formal de Gianni Infantino, presidente de la FIFA, y decidió quedarse junto al plantel inglés.

Incluso, en un acto que algunos calificaron de inusual, el expresidente estadounidense saltó junto a los futbolistas en una especie de celebración improvisada.

Posteriormente, se retiró de la escena entre vítores y risas.

Este momento fue capturado en un video que rápidamente circuló en las redes sociales, generando todo tipo de comentarios. Algunos usuarios señalaron que la presencia de Trump en la celebración fue una muestra de su interés por mantenerse en el centro de atención, mientras que otros consideraron que fue una decisión inapropiada para un acto oficial.

Supuestamente, esta participación del mandatario en un evento deportivo internacional no tiene precedentes y recuerda a otros episodios históricos donde figuras políticas han querido influir o participar en eventos deportivos por motivos estratégicos o de imagen.

Por ejemplo, en los Juegos Olímpicos de 2012 en Londres, la presencia de políticos y celebridades generó controversia, aunque en menor escala.

El costo de la participación de Trump en estos eventos, incluyendo viajes y seguridad, se estima en unos 50,000 euros, cantidad que, en el contexto de la política internacional, representa una inversión significativa en la promoción de la imagen del país y del propio mandatario.

Por su parte, el Chelsea, que supuestamente invirtió alrededor de 70 millones de euros en su plantilla en la temporada previa, pudo celebrar con una victoria que muchos consideran como uno de los logros más importantes en la historia del club.

La final del Mundial de Clubes 2025 fue vista por millones de espectadores en todo el mundo, y la presencia de figuras políticas en eventos deportivos continúa siendo un tema de debate, especialmente cuando se mezclan con celebraciones deportivas y actos oficiales.