Desde el 23 de junio, Bakio vuelve a contar con atención pediátrica en su centro de salud, tras un período en el que esta atención se trasladó a Mungia debido a la falta de profesionales. La recuperación del servicio refleja los esfuerzos del sistema sanitario vasco por fortalecer la atención primaria y garantizar cobertura a la población infantil.
A partir del 23 de junio, la localidad de Bakio en Euskadi ha recuperado su servicio de atención pediátrica en su centro de salud habitual. Este cambio marca el fin de unos meses en los que la asistencia pediátrica se ofrecía en Mungia, debido a la escasez de profesionales sustitutos disponibles para cubrir la plaza en Bakio.
La reapertura del servicio en su frecuencia habitual, dos días a la semana (los martes y viernes), responde a los esfuerzos coordinados de Osakidetza y el Departamento de Salud para reforzar la atención en atención primaria en la región.
La situación se originó cuando la pediatra titular en Bakio tuvo que ausentarse por motivos médicos, y las dificultades para encontrar un sustituto impidieron mantener el servicio en la localidad.
Como consecuencia, durante varios meses, los niños y niñas de Bakio tuvieron que desplazarse a Mungia para recibir atención especializada, lo que generó cierta preocupación entre las familias y profesionales sanitarios.
Sin embargo, en ese período, Osakidetza trabajó con intensidad en procesos de selección y movilidad de personal para solucionar la problemática.
Gracias a estas gestiones, el centro de salud de Bakio ha logrado cubrir la plaza pediátrica, permitiendo que los niños reciban atención en su municipio en las mismas condiciones previas.
El trabajo conjunto permitió derivar parcialmente la atención a profesionales especializados en pediatría en Mungia, quienes atendieron a la población infantil de Bakio durante el tiempo que fue necesario.
Este episodio refleja una problemática recurrente en la atención sanitaria en áreas rurales y pequeñas localidades de Euskadi y otras regiones, donde la escasez de profesionales médicos especializados dificulta la oferta de servicios esenciales.
La falta de pediatras, en particular, representa un desafío en la atención primaria, dado que la pediatría requiere de una especialización que no siempre resulta fácil de cubrir en determinados territorios.
Desde hace años, el Sistema Vasco de Salud ha invertido en la mejora y refuerzo de su red de atención primaria, consciente de que fortalecer estos servicios resulta fundamental para garantizar el derecho a la salud y reducir las desigualdades sociales.
El Departamento de Salud ha llevado a cabo campañas de reclutamiento y movilidad, además de incentivar la formación de nuevos profesionales en regiones con déficit.
Asimismo, la experiencia en Bakio puede servir como ejemplo para otros municipios donde la atención pediátrica enfrenta dificultades similares. La recuperación del servicio en Bakio también forma parte de los esfuerzos del Sistema Vasco por ofrecer una atención sanitaria de calidad, cercana, y en el menor tiempo posible, a todas las personas, sin que tengan que desplazarse largas distancias.
El compromiso de las instituciones sanitarias en Euskadi sigue siendo garantizar la cobertura y calidad en los servicios primarios, una prioridad que se ve reflejada en el trabajo constante para eliminar obstáculos y garantizar que cada población, independientemente de su tamaño o ubicación, pueda acceder a una atención adecuada y oportuna.