El Bilbao Exhibition Center de Barakaldo fue escenario de las pruebas selectivas para la sexta convocatoria conjunta de la Policía Vasca, que busca cubrir 675 plazas en la Ertzaintza y policías locales en Euskadi. La convocatoria, la más numerosa hasta la fecha, reunió a más de 4.800 aspirantes y representa un paso importante en la incorporación de nuevos agentes a las fuerzas de seguridad vascas. La selección involucra diferentes fases, incluyendo exámenes psicotécnicos, conocimientos, pruebas físicas y entrevistas, con un innovador modelo de formación que prioriza la cohesión y colaboración entre los futuros agentes. Este proceso selectivo, realizado en el Bilbao Exhibition Center de Barakaldo, es uno de los mayores en la historia de la Policía Vasca. De las 4.812 personas inscritas, participaron 2.315 hombres y 1.294 mujeres, quienes aspiran a obtener una de las 675 plazas ofrecidas en total: 473 para la Ertzaintza y 177 para policías locales en diversos ayuntamientos. La mayoría de los candidatos provienen de Bizkaia, seguido por Gipuzkoa y Álava, en una muestra clara del interés por incorporarse a los cuerpos de seguridad del País Vasco. En términos demográficos, el 70,98% de los inscritos tiene entre 18 y 30 años, aunque una proporción significativa (28,26%) tiene entre 31 y 40 años. La formación académica también es notable: una tercera parte cuenta con estudios superiores, mientras que el resto posee bachillerato. Además, más del 50% de los aspirantes acreditan un nivel B2 de euskera, con un porcentaje menor que cuenta con C1 y C2, reflejando la importancia del dominio del idioma en los cuerpos policiales vascos. El proceso selectivo comenzó con exámenes que incluyen un test de conocimientos, un test psicotécnico y uno de personalidad. Solo quienes aprueben estos serán considerados para continuar con las pruebas físicas y entrevistas personales. La finalidad es incorporar a estos nuevos agentes a partir de finales de 2026, tras completar una innovadora formación de ocho meses. Esta capacitación, que será en la Academia de Arkaute, tendrá una novedad: los aspirantes volverán a pernoctar en instalaciones académicas para promover la cohesión, el trabajo en equipo y el conocimiento mutuo entre las futuras y los futuros agentes de la Ertzaintza y las policías locales. Este modelo de formación busca modernizar y agilizar el proceso de incorporación, adaptándose a las necesidades actuales de seguridad pública en Euskadi. La propuesta también contempla nuevos métodos pedagógicos y mayor interacción durante la capacitación, en un contexto donde la colaboración entre diferentes cuerpos policiales es más vital que nunca. Desde el inicio de esta convocatoria, las expectativas son altas, y los aspirantes deben superar varias fases para acceder a las plazas ofrecidas. La participación en esta convocatoria se enmarca en la tradición vasca de reforzar sus cuerpos de seguridad y adaptar sus estrategias a los desafíos del siglo XXI. La inversión en formación y selección de calidad refleja el compromiso del País Vasco con la seguridad ciudadana, en un momento en que la demanda de profesionales capacitados en el ámbito policial continúa creciendo. La iniciativa también destaca por su enfoque en la integración de diferentes comunidades de Euskadi, promoviendo un servicio policial más cercano, efectivo y coordinado.

En Euskadi, el Bilbao Exhibition Center de Barakaldo fue escenario de una de las convocatorias más importantes en la historia de la Policía Vasca. La sexta edición conjunta de selección para la Ertzaintza y las policías locales en diferentes municipios del País Vasco atrajo a un total de 4.812 aspirantes, de los cuales participaron activamente 2.315 hombres y 1.294 mujeres. Esta convocatoria, que ofrece 473 plazas para la Ertzaintza y 177 para los cuerpos de policía local, simboliza un esfuerzo continuado de la comunidad autónoma por fortalecer sus fuerzas de seguridad en un momento donde la estabilidad y la protección ciudadana son prioritarios.

Este proceso de selección, que comenzó con una convocatoria histórica, tiene como objetivo incorporar nuevos agentes en un contexto de modernización y eficiencia en los cuerpos policiales vascos.

Los aspirantes enfrentaron varias pruebas, empezando con un examen de conocimientos tipo test, un test psicotécnico y otro de personalidad. Solo quienes logren superar estas etapas podrán avanzar hacia las pruebas físicas y una entrevista personal, etapas que determinarán la incorporación final.

La mayoría de los candidatos proceden de Bizkaia, reflejando la tradición y la densidad poblacional de esta provincia. Sin embargo, también destacan inscritos de Gipuzkoa y Álava, así como de otras regiones fuera de Euskadi, demostrando el interés y la aspiración de muchas personas por formar parte de los cuerpos policiales del País Vasco.

La edad predominante entre los inscritos oscila entre los 18 y 30 años, aunque una parte significativa, aproximadamente el 28%, tiene entre 31 y 40 años, lo que evidencia una participación diversificada en términos de edad y experiencia.

Desde un punto de vista académico, aproximadamente un 33% de los aspirantes posee estudios superiores, mientras que la mayoría cuenta con bachillerato.

La competencia en euskera también es un factor destacado: más de la mitad acredita al menos nivel B2 en el idioma, y algunos alcanzan conocimientos C1 y C2.

Esto refleja la importancia de la lengua vasca en el ámbito policial y la necesidad de profesionales bilingües que puedan atender a la ciudadanía en sus diferentes necesidades.

El proceso de formación de los nuevos agentes será innovador y será realizado en la Academia de Arkaute, con una duración de ocho meses, la más extensa en términos de currículo en los últimos años.

Una de las novedades será la incorporación de la pernocta en las instalaciones académicas para fomentar la cohesión, el trabajo en equipo y el conocimiento mutuo entre los futuros ertzainas y policías locales.

Este modelo busca no solo mejorar la capacitación técnica, sino también fortalecer los lazos entre los diferentes cuerpos y promover un enfoque más cercano y colaborativo en el trabajo policial.

El inicio de la capacitación está previsto para principios de 2026, con la incorporación de los agentes a finales de ese mismo año. La inversión en recursos humanos, instalaciones y pedagogía refleja la prioridad del Gobierno Vasco en ofrecer una seguridad pública de calidad, adaptada a las necesidades actuales y futuras de la ciudadanía.

Este proceso también responde a la tendencia histórica en Euskadi de potenciar el empleo público en el ámbito policial. Desde la creación de la Ertzaintza en 1982, tras la recuperación del autogobierno, las fuerzas policiales vascas han tenido un papel crucial en mantener la paz y el orden.

La adaptación constante de sus metodologías y la incorporación de nuevas tecnologías han sido clave para su evolución.

En conclusión, la convocatoria en Barakaldo no solo representa una oportunidad laboral para miles de personas, sino también un paso estratégico hacia una policía más moderna, eficiente y cohesionada.

La inversión en formación y selección de calidad garantiza que los nuevos agentes puedan afrontar los desafíos presentes y futuros, promoviendo un Euskadi más seguro y confiado en sus instituciones policiales.