El Gobierno Vasco aprobó, en la sesión de este lunes, una modificación del decreto que regula la concesión de subvenciones a organizaciones sindicales y empresariales para desarrollar planes formativos, con el fin de garantizar la continuidad de estas acciones y asegurar que se ajusten a las necesidades de cualificación de las personas vinculadas a esas entidades en sus respectivas áreas de actuación.

Esta reforma responde a la necesidad de adaptar la normativa a la Ley Reguladora del Régimen de Subvenciones. Dicha norma exige actualizar las bases reguladoras de ayudas de vigencia indefinida para ajustarlas al nuevo marco jurídico en un plazo máximo de 24 meses desde su entrada en vigor; de no hacerlo, esas bases podrían quedar derogadas.

Con la actualización, el Departamento de Economía, Trabajo y Empleo pretende establecer un marco de apoyo que impulse la formación y fortalezca el compromiso institucional con la mejora de la cualificación profesional en Euskadi.

Históricamente, Euskadi ha utilizado subvenciones y planes de formación como herramientas para modernizar el tejido productivo y favorecer la empleabilidad en diversos sectores.

La medida se enmarca en esa trayectoria y refuerza la capacidad de sindicatos y patronal para diseñar y ejecutar acciones formativas acordes a las exigencias del mercado laboral actual.

También se busca que este cambio normativo contribuya a una gestión más estable y previsible de los fondos, facilitando a las organizaciones la planificación de programas de cualificación a medio y largo plazo, al tiempo que el Ejecutivo vasco supervisa su implementación y resultados.

En el marco europeo, Euskadi ha destacado su compromiso con la formación continua como palanca de crecimiento y cohesión social. La medida actual se suma a un conjunto de iniciativas orientadas a reforzar la conexión entre educación, empleo y desarrollo económico en el territorio.