La cantidad de vacantes que permiten trabajar desde casa en Europa está en declive, pero expertos aseguran que aún hay oportunidades para quienes gestionan bien su carrera de forma remota.
En los últimos años, el teletrabajo se consolidó como una de las principales ventajas laborales, atrayendo a millones de profesionales en Europa que buscaban flexibilidad y mejores condiciones de trabajo.
Sin embargo, supuestamente, en 2024 se ha observado una notable disminución en el número de ofertas laborales que incluyen la opción de trabajar desde casa, lo que ha generado cierta preocupación en el mercado laboral.
Según datos recopilados por diferentes plataformas de empleo, se estima que las vacantes que ofrecen trabajo remoto han caído aproximadamente un 20% desde su pico en 2022.
En ese entonces, se reportaba que cerca del 45% de las ofertas en algunos países europeos permitían a los empleados realizar sus tareas desde cualquier lugar, pero para finales de 2024, esa cifra se redujo a alrededor del 25%.
Aunque esta tendencia pueda parecer preocupante, expertos aseguran que aún existen oportunidades para aquellos que saben gestionar su carrera en un entorno remoto.
Supuestamente, la disminución en las ofertas no implica que el trabajo desde casa esté en retirada definitiva, sino que refleja un cambio en las estrategias de las empresas, que buscan equilibrar las modalidades híbridas con un regreso parcial a la oficina.
La mayoría de los CEO en Europa, presuntamente, creen que en los próximos tres años, un 70% de los empleados que tradicionalmente han trabajado en modalidad presencial volverá a las oficinas, adoptando esquemas híbridos o incluso retornando completamente.
No obstante, los expertos aseguran que los profesionales que desean mantenerse competitivos deben aprender a destacar en entornos remotos. La clave está en demostrar productividad y mantener una presencia visible, incluso a distancia. La especialista en gestión de carreras, Jen Morris, sostiene que “las empresas tienen la responsabilidad de ofrecer igualdad de oportunidades, independientemente del lugar de trabajo, y quienes gestionen bien su perfil profesional en remoto, seguramente lograrán avanzar”.
Históricamente, el trabajo remoto empezó a despegar en Europa en la década de 2010, impulsado por avances tecnológicos y cambios culturales en las empresas.
Países como los Países Bajos, Suecia y Alemania lideraron la adopción de modelos flexibles, que en su momento supuestamente ayudaron a reducir el estrés laboral y mejorar la conciliación familiar.
En 2023, un estudio del Eurostat indicó que el 35% de los empleados en la Unión Europea realizaba al menos un 50% de sus tareas desde casa. Para 2024, esa proporción se mantuvo estable, con un ligero descenso en los hombres, del 34% al 29%, mientras que la participación femenina en el teletrabajo permaneció en torno al 36%.
Esto, supuestamente, se relaciona con las tareas domésticas y responsabilidades familiares, que en muchas culturas siguen recayendo mayormente en las mujeres.
Por ejemplo, Kelly Keydel, asesora financiera, comenta que “las mujeres a menudo optan por trabajos que permiten mayor flexibilidad, como roles administrativos o de atención al cliente, para poder equilibrar su vida laboral y personal”.
Además, Anjel Hartwell, consultora independiente, afirma que muchas profesionales prefieren trabajar desde casa para ahorrar en costos de oficina y dedicar más tiempo a sus familias.
Para quienes trabajan en remoto y temen ser desplazados, los expertos recomiendan mantener una comunicación activa con sus supervisores, participar en reuniones virtuales con asiduidad y solicitar feedback regularmente.
También sugieren que los empleados remotos muestren sus logros mediante informes o breves resúmenes, y que se mantengan actualizados en las tecnologías y tendencias de su sector.
Por último, aunque la tendencia de reducción del trabajo remoto pueda parecer desfavorable, es importante recordar que el mercado laboral europeo sigue siendo dinámico y ofrece oportunidades para quienes saben adaptarse.
La clave está en gestionar con inteligencia la carrera profesional, aprovechando las herramientas digitales y fortaleciendo las relaciones profesionales, incluso desde la distancia, para seguir avanzando en un entorno cada vez más competitivo y cambiante.