Un análisis reciente vincula cada tipo MBTI con la profesión mejor remunerada, con salarios convertidos a euros y proyecciones de crecimiento para 2033.
Un análisis supuestamente basado en datos del Departamento de Trabajo de Estados Unidos y en resultados de una encuesta en el foro Personality Database propone emparejar cada tipo de personalidad MBTI con la ocupación mejor remunerada.
Según la reconstrucción de la analítica, los salarios iniciales se expresan en dólares, pero para ampliar su alcance, se han convertido a euros con una tasa estimada de 0,92 EUR por 1 USD.
Supuestamente, esta conversión ofrece una referencia comparable para lectores de España y otros países de la zona euro. La idea central es que las personas pueden identificar sus preferencias MBTI (E/I, S/N, T/F, J/P) y, con ello, orientarse hacia campos donde sus fortalezas podrían traducirse en mayores ingresos.
Aunque el estudio se apoya en datos oficiales de empleo, también recurre a resultados de encuestas de usuarios del foro para definir qué roles resultan atractivos para cada tipo.
Aun así, la interpretación debe tomarse con cautela, y es importante recordar que el MBTI está sujeto a debates sobre su validez como predictor laboral.
Presuntamente, expertos del tema señalan que el perfil emocional y cognitivo de una carrera puede variar por región, experiencia y certificaciones, por lo que estas cifras deben considerarse como tendencias, no como promesas uniformes.
A efectos de claridad, el análisis describe 16 perfiles y asocia cada uno con una profesión que, en la muestra analizada, ofrece salarios medios elevados y perspectivas de crecimiento en la próxima década.
A título histórico, el MBTI fue desarrollado por Isabel Briggs Myers y Katharine Cook Briggs durante la segunda mitad del siglo XX como una versión práctica de las ideas de Carl Jung; desde entonces ha sido adoptado por recursos humanos y orientadores laborales, aunque no siempre goza de consenso entre psicólogos y economistas.
ISTJ — Cirujano: salario medio estimado de aproximadamente €220.100 al año. Este tipo, conocido como “El Logístico”, tiende a destacarse por precisión y disciplina, cualidades que, en el ámbito quirúrgico, pueden traducirse en prácticas de alto rendimiento y responsabilidad.
INFJ — Psiquiatra: salario medio estimado de aproximadamente €208.730 al año. Apodado “El Defensor”, este perfil suele orientar su labor a comprender el comportamiento humano y a atender a necesidades complejas de salud mental, campo que, en la práctica, puede ser especialmente demandado.
ESTJ — Capitán de aerolínea: salario medio estimado de aproximadamente €182.250 al año. Conocido como “El Ejecutivo”, este perfil demuestra capacidad para gestionar operaciones complejas y tomar decisiones críticas bajo presión.
INTP — Físico: salario medio estimado de aproximadamente €152.987 al año. Apodado “El Lógico”, su fortaleza en el razonamiento analítico puede abrir puertas en investigación y desarrollo científico.
ENFP — Director de publicidad: salario medio estimado de aproximadamente €146.887 al año. “El Campañero” destaca por creatividad y enfoque en audiencias, habilidad que, en publicidad, puede traducirse en compensaciones relevantes cuando se lideran equipos y campañas.
ENTJ — Fiscal (Prosecutor): salario medio estimado de aproximadamente €139.067 al año. Este tipo, llamado “El Comandante”, tiende a sobresalir en roles que requieren estrategia, liderazgo y toma de decisiones institucionales.
ENFJ — Gerente de recursos humanos: salario medio estimado de aproximadamente €128.828 al año. Conocidos como “Los Protagonistas”, suelen funcionar como conectores que impulsan el desarrollo y la cohesión dentro de las organizaciones.
ESTP — Gerente de ventas: salario medio estimado de aproximadamente €127.015 al año. “El Emprendedor” se siente cómodo en ambientes dinámicos y desafiantes, donde el objetivo es impulsar resultados comerciales.
ISFJ — Farmacéutico: salario medio estimado de aproximadamente €126.482 al año. El perfil “El Defensor” aporta seguridad y confianza en el cuidado de la salud, un valor apreciado en farmacias y entornos clínicos.
ISTP — Ingeniero eléctrico: salario medio estimado de aproximadamente €109.278 al año. Conocidos como “El Virtuoso”, destacan por resolver problemas técnicos con enfoque práctico y precisión.
INTJ — Científico de datos: salario medio estimado de aproximadamente €103.583 al año. Denominado “El Arquitecto”, es común ver a estos perfiles liderar iniciativas de análisis y desarrollo de soluciones basadas en datos.
INFP — Animador: salario medio estimado de aproximadamente €91.816 al año. El tipo “El Mediador” aporta sensibilidad y creatividad, cualidades que pueden verse reflejadas en proyectos artísticos y de entretenimiento.
ENTP — Psicólogo forense: salario medio estimado de aproximadamente €86.765 al año. Llamados “El Debate”, suelen sumergirse en el análisis de casos complejos y en la búsqueda de verdades en contextos legales y de investigación.
ESFP — Modelo: salario medio estimado de aproximadamente €82.791 al año. El perfil “El Intérprete” tiende a brillar en industrias creativas y de entretenimiento donde la presencia visual es un activo.
ESFJ — Profesor de posgrado: salario medio estimado de aproximadamente €77.262 al año. “El Consul” suele valorar la transmisión del conocimiento y la interacción con estudiantes y colegas en entornos académicos.
ISFP — Diseñador de moda: salario medio estimado de aproximadamente €74.235 al año. Conocidos como “Los Aventurares”, exploran la creatividad en industrias que fusionan estética y funcionalidad.
Es relevante señalar que los salarios pueden variar por región, experiencia y certificaciones, y que estas cifras son orientativas: reflejan medias de muestra y proyecciones para un marco temporal cercano a la década siguiente, pero no deben tomarse como promesas absolutas.
En el caso de cada tipo, la asignación de una profesión específica responde a un marco de preferencias y habilidades que, según el análisis, suelen estar alineadas con altos ingresos, aunque la trayectoria profesional individual puede desviarse por múltiples factores.
En cualquier caso, la lectura de estos resultados puede servir como guía para quienes buscan una vocación que combine afinidad personal y perspectivas económicas, sin perder de vista que la felicidad y el impacto laboral también dependen de otros elementos más allá del salario.