El 4 de marzo de 2025, el Consejo de Ministros del Gobierno español autorizó la utilización del Fondo de Contingencia para destinar 6.800.000 euros (aproximadamente 7.500.000 dólares) a la implementación de medidas que busquen fomentar la internacionalización de empresas y autónomos que fueron impactados por la Depresión Aislada en Niveles Altos (DANA), ocurrida entre el 28 de octubre y el 4 de noviembre de 2024.

Esta decisión se enmarca dentro del Real Decreto-ley 8/2024, aprobado el 28 de noviembre de 2024, que establece un conjunto de acciones urgentes para ayudar a las zonas afectadas por este fenómeno climático adverso.

La Secretaría de Estado de Comercio hizo una solicitud para un crédito extraordinario con el propósito de financiar iniciativas de internacionalización específicamente dirigidas a los afectados.

El DANA causó daños significativos en varios municipios, lo que ha llevado al Gobierno a adoptar medidas urgentes que redunden en la recuperación y revitalización económica de las áreas más perjudicadas.

Entre las medidas contempladas en el mencionado Real Decreto-ley se incluyen la exención de cuotas para la participación en ferias y eventos de promoción internacional organizados por ICEX España Exportación e Inversiones hasta el 31 de diciembre de 2025.

Esto es fundamental para que las empresas españolas puedan seguir expandiendo sus oportunidades comerciales en el extranjero, a pesar de las dificultades impuestas por la DANA.

Esta exención se estima que podría representar un ahorro de 800.000 euros para el ejercicio 2025.

Adicionalmente, se prevé una convocatoria para un programa específico de ayudas diseñado para la internacionalización de empresas. De acuerdo con las estimaciones, se considera necesario un importe máximo de seis millones de euros para estas ayudas, que buscarán garantizar que las entidades afectadas no solo se recuperen, sino que también puedan crecer en mercados internacionales.

La aprobación de estas medidas se fundamenta en la necesidad de una respuesta rápida y efectiva a los daños causados por la DANA. Este fenómeno, que se ha intensificado en años recientes, ha puesto de relieve la importancia de contar con un marco normativo que permita una actuación oportuna frente a desastres naturales que impactan la economía dirigida a la sostenibilidad y la internacionalización.

Históricamente, España ha estado expuesta a diversas crisis económicas y desastres naturales, y cada uno de estos eventos ha llevado a un aumento en la atención del Gobierno hacia la resiliencia económica y la adaptación a circunstancias adversas.

Con este tipo de acciones, el Gobierno busca no solo auxiliar a los damnificados temporalmente, sino también construir una base más sólida que permita a las empresas españolas establecerse y prosperar en un entorno global, lo que resulta esencial para la economía del país.