En las recientes pruebas de seguridad llevadas a cabo por el Instituto de Seguros para la Seguridad en las Carreteras (IIHS), los modelos Ford Bronco y Bronco Sport no lograron obtener calificaciones destacadas, lo que ha generado controversia en el segmento de los SUV compactos y off-road.

La evaluación, que busca determinar el nivel de protección que ofrecen los vehículos en diferentes tipos de impactoes, reveló que estos modelos presentaron riesgos elevados en ciertos aspectos críticos, especialmente en la protección de los pasajeros en la parte trasera.

El IIHS, una organización sin fines de lucro fundada en 1959 y respaldada por las aseguradoras de vehículos en Estados Unidos, realiza pruebas rigurosas para promover la seguridad vial y reducir lesiones en accidentes automovilísticos.

Sus evaluaciones consideran diversos aspectos, incluyendo pruebas de impacto frontal, lateral, de superposición moderada y de obstáculos en la cabeza y el cuello.

Los resultados de estas pruebas influyen en la reputación y en la decisión de compra de los consumidores.

En el caso de los Ford Bronco y Bronco Sport, los resultados no fueron positivos. Ambos modelos obtuvieron una clasificación de 'marginal' en varias pruebas, lo cual los descalifica para recibir el reconocimiento de 'Top Safety Pick+'.

La razón principal radica en el riesgo elevado de lesiones en el cuello y la cabeza de los pasajeros traseros durante las pruebas de impacto. La organización señala que, en la prueba de impacto de superposición moderada, que simula un choque frontal en el que solo una parte de la parte frontal del vehículo impacta contra un objeto fijo, los resultados indicaron una mayor probabilidad de lesiones en el tórax y la cabeza.

El Bronco Sport, en particular, mostró un comportamiento preocupante en la prueba de cinturón de seguridad, donde se detectó que el cinturón en la parte trasera se deslizó hacia arriba, aumentando el riesgo de lesiones internas en el abdomen y el tórax.

Además, en las evaluaciones de impacto frontal en la parte lateral, el vehículo obtuvo una calificación aceptable, pero con métricas elevadas de lesiones en la pelvis del conductor.

La organización también mencionó que ciertos elementos de seguridad, como los sistemas de prevención de colisiones y los faros, no lograron una calificación adecuada en comparación con otros modelos del mercado.

A diferencia de Ford, otras marcas como Hyundai, Kia, Toyota y Nissan lograron obtener el codiciado premio 'Top Safety Pick+', que certifica que sus vehículos cumplen con los estándares más altos en protección de pasajeros y peatones.

Modelos como el Hyundai Elantra, Kia K4 y Toyota Prius, todos compactos, así como el SUV mediano Nissan Murano y el eléctrico Toyota bZ4X, lograron destacar por su desempeño en las pruebas más exigentes.

Desde la perspectiva de Ford, un portavoz de la compañía afirmó que los modelos Bronco y Bronco Sport cumplen con los requisitos de seguridad establecidos por la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en Carreteras (NHTSA).

La firma asegura que ambos modelos han obtenido la calificación máxima de cinco estrellas en las evaluaciones de la NHTSA, destacando que actualmente son los únicos en su segmento en lograr este reconocimiento.

No obstante, las evaluaciones del IIHS resaltan la necesidad de mejorar algunos aspectos en la protección de los pasajeros traseros y en ciertos sistemas de seguridad activa.

La disconformidad con los resultados plantea una interrogante sobre si Ford implementará cambios o mejoras en futuras versiones de estos modelos para elevar su nivel de protección y cumplir con los estándares internacionales.

En el contexto histórico, Ford ha sido una marca pionera en innovación y seguridad desde sus inicios en 1903, cuando introdujo el Modelo T, el primer automóvil asequible para la clase media.

A lo largo de los años, la firma ha desarrollado tecnologías avanzadas de seguridad, como los cinturones de seguridad de tres puntos en los años 50 y los sistemas de asistencia al conductor en los modelos más recientes.

Sin embargo, los resultados recientes indican que aún hay áreas en las que la marca debe avanzar para mantenerse competitiva en un mercado cada vez más exigente en materia de seguridad vehicular.

Con estos resultados, los consumidores interesados en adquirir un SUV de Ford deben considerar la importancia de las calificaciones de seguridad y mantenerse informados sobre las actualizaciones y mejoras que la compañía pueda realizar para reforzar la protección de sus ocupantes.

La seguridad sigue siendo un factor crucial al momento de elegir un vehículo, y los resultados del IIHS reflejan la necesidad de una revisión de los estándares de seguridad en ciertos modelos de la marca.