El Gobierno español autoriza un préstamo para fomentar la contratación de desempleados en localidades impactadas por la DANA, con un presupuesto de 50 millones de euros.

El 21 de enero de 2025, el Consejo de Ministros de España dio luz verde a la concesión de un crédito extraordinario por un total de 50 millones de euros (aproximadamente 54 millones de dólares) destinado a financiar un plan de empleo que busca la contratación de personas desempleadas en las zonas que sufrieron los efectos devastadores de la DANA.

Este crédito será gestionado por el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) y está enmarcado dentro de lo establecido en el Real Decreto-ley 7/2024, aprobado el 11 de noviembre de 2024. Dicho decreto establece medidas urgentes para impulsar la respuesta inmediata y la recuperación de las áreas afectadas por la DANA, la cual se manifestó entre el 28 de octubre y el 4 de noviembre de 2024.

La DANA, que significa Depresión Aislada en Niveles Altos, provocó severas inundaciones y daños en infraestructuras en varias comunidades autónomas.

En este sentido, el Gobierno ha reconocido que los daños han sido significativos, por lo que ha decidido implementar este plan de empleo como una de las acciones prioritarias para ayudar a los afectados.

El Real Decreto-ley 7/2024, en su artículo 49, señala que el importe destinado a este crédito se distribuirá directamente entre los municipios identificados como perjudicados por la DANA. Este procedimiento de asignación se realizará a través de subvenciones destinadas a cubrir los costes salariales de la contratación de personas desempleadas que estén registradas como demandantes de empleo.

Para detallar el proceso de otorgamiento de estas subvenciones, se ha aprobado el Real Decreto 1282/2024, con fecha del 17 de diciembre, que regula la concesión directa de ayudas por parte del SEPE. Este enfoque busca facilitar la recuperación, rehabilitación y reconstrucción de los servicios y bienes en las localidades impactadas por este fenómeno climático.

Cabe mencionar que la necesidad de movilizar estos recursos extraordinarios surge del hecho de que no existían créditos presupuestarios suficientes dentro del SEPE para abordar las consecuencias de la DANA. Esta situación imprevisible ha llevado al Gobierno a tomar medidas rápidas y efectivas para mitigar el impacto del desastre.

En conclusión, esta acción refleja el compromiso del Gobierno español de atender de manera inmediata las necesidades de empleo en las zonas afectadas por desastres naturales, garantizando que las comunidades afectadas puedan recuperar su actividad económica y reconstruir su tejido social.

La inversión en empleo es una vía fundamental para la recuperación de estas áreas, brindando oportunidades a quienes han visto interrumpidas sus fuentes de ingreso debido a eventos imprevistos como la DANA.