En el competitivo mercado de las bebidas no alcohólicas en Estados Unidos, las preferencias de los consumidores continúan evolucionando, reflejándose en los datos de ventas anuales publicados por Beverage Digest.

Este informe, considerado una referencia en la industria, revela que Coca-Cola sigue siendo la marca de soda más vendida en 2024, manteniendo su liderazgo a pesar de los cambios en las tendencias de consumo.

Históricamente, Coca-Cola ha dominado el mercado estadounidense desde hace décadas, consolidándose como un icono cultural y una de las marcas más reconocidas globalmente.

Sin embargo, en los últimos años, la competencia ha aumentado significativamente, especialmente con la entrada de nuevas marcas y el crecimiento de bebidas alternativas como las aguas embotelladas, los tés listos para beber y las bebidas energéticas.

Según los datos de Beverage Digest, Coca-Cola logró vender aproximadamente 150 millones de litros en 2024, lo que equivale a cerca de 135 millones de euros al tipo de cambio actual (1 dólar = 0,9 euros).

Este volumen le permitió mantener el primer puesto en la lista de las bebidas gaseosas más populares en EE.UU.

Por otro lado, Pepsi, que durante décadas ocupó la segunda posición, ha visto una ligera disminución en sus ventas. En 2024, sus cifras se redujeron a unos 90 millones de litros, aproximadamente 81 millones de euros, situándola en la cuarta posición en el ranking.

La compañía ha intentado revitalizar su línea con nuevas campañas y productos, pero la competencia y los cambios en los gustos del consumidor parecen jugar en contra.

En cambio, Sprite ha logrado un notable ascenso, desplazando a Pepsi del segundo lugar y posicionándose como la segunda marca más vendida en 2024. La preferencia por bebidas con menos azúcar y opciones más refrescantes ha favorecido a Sprite, que ha registrado ventas cercanas a los 80 millones de litros (72 millones de euros).

Este cambio refleja una tendencia clara hacia opciones más saludables y menos calóricas.

Además de las sodas tradicionales, el mercado de bebidas en EE.UU. continúa diversificándose. El agua embotellada se mantiene en el primer puesto en volumen y valor, con ventas que superan los 200 millones de litros en 2024, unos 180 millones de euros.

Los tés listos para beber y las bebidas energéticas también han experimentado un crecimiento significativo, captando la atención de consumidores jóvenes y activos.

Este escenario no solo refleja las preferencias cambiantes del público estadounidense, sino también una estrategia de las marcas para adaptarse a las nuevas tendencias de salud y bienestar.

La innovación en sabores, empaques y campañas de marketing son esenciales para mantener la relevancia en un mercado tan dinámico.

En conclusión, aunque Coca-Cola continúa dominando en ventas, la competencia se intensifica y las preferencias de los consumidores apuntan a opciones más saludables y variadas.

La industria de las bebidas en Estados Unidos sigue siendo un reflejo de los cambios culturales y sociales en la sociedad actual, donde la innovación y la adaptación son clave para mantenerse en la cima.