La Selección Argentina de fútbol se prepara para realizar un amistoso benéfico este sábado en el estadio de Huracán, donde se enfrentará a su equipo Sub 20.

Este evento tiene como objetivo recaudar fondos para el Hospital Penna de Bahía Blanca, que ha sufrido severos daños a causa de las recientes inundaciones en la ciudad.

Las entradas, que fueron puestas a la venta el jueves, se agotaron en tan solo treinta minutos, lo que sugiere una asistencia masiva que podría llenar completamente el estadio Ducó.

Este tipo de acciones solidarias no son nuevas en la historia del fútbol argentino. A lo largo de los años, se han llevado a cabo varios partidos en respuesta a desastres naturales, demostrando así el compromiso de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) y de los jugadores con la comunidad.

En total, se registran al menos cuatro encuentros a lo largo de la historia que se destacan por su carácter benéfico: tres de ellos fueron organizados tras terremotos y uno más a raíz de inundaciones.

Uno de los episodios más recordados es el terremoto que azotó San Juan el 15 de enero de 1944. Este acontecimiento, considerado uno de los desastres naturales más graves de Argentina, devastó la ciudad, dejando un saldo de al menos 10,000 muertes y destruyendo cerca del 80% de la infraestructura.

Ante la urgencia, la AFA y la Asociación Uruguaya de Fútbol decidieron organizar dos partidos el 29 de enero de ese año, uno en Buenos Aires y otro en Montevideo.

La respuesta de los jugadores y la comunidad fue notable, destacando el encuentro jugado en el Gasómetro, que contó con la participación de figuras legendarias como Ángel Labruna y Arsenio Erico.

En otro momento crítico, en mayo de 1981, el norte de Santa Fe sufrió inundaciones devastadoras. Como respuesta, se llevó a cabo un amistoso el 18 de junio de ese mismo año en la cancha de Rosario Central, donde un combinado de jugadores locales se enfrentó a la Selección Argentina.

Ese partido recaudó una suma significativa, contribuyendo a las labores de reconstrucción de los pueblos afectados. En el equipo argentino jugaban seis campeones del mundo del '78, lo que atrajo a más de 16,000 espectadores.

Asimismo, en 1985, otro amistoso fue organizado para ayudar a las víctimas de un tremendo terremoto que ocurrió en Mendoza, resultando en más de 200 heridos y varias muertes.

Aquel encuentro también contó con la participación de futuros campeones, de quienes se esperaba que se destacaran en la Copa Mundial del año siguiente.

Este nuevo amistoso en el estadio de Huracán no solo representa una oportunidad para que los fanáticos vean a sus héroes del fútbol, sino que también reafirma la conexión entre el deporte y la comunidad.

Aun en la ausencia de figuras estelares como Lionel Messi y Lautaro Martínez debido a lesiones, la AFA y los jugadores continuarán con su tradición de solidaridad.

La convocatoria del público, que ha demostrado su interés al agotar las entradas rápidamente, asevera que el espíritu de unidad sigue vivo en el fútbol argentino, dispuesto a ayudar a quienes más lo necesitan.