El club San Lorenzo recibe una intimación por parte de Marcelo Tinelli debido a una deuda relacionada con el pago de seguros y derechos de transferencia, que asciende a cerca de 1,1 millones de dólares.
Los problemas económicos en el club San Lorenzo parecen no tener fin y, en las últimas semanas, la situación se ha agravado con la aparición de una nueva reclamación que añade tensión a la gestión del club en plena temporada.
La noticia surge a partir de una intimación de Marcelo Tinelli, quien en su momento fue presidente y actualmente es una de las figuras vinculadas al club, reclamando el pago de aproximadamente 1,1 millones de dólares (alrededor de 980.000 euros).
Este reclamo se relaciona con una vieja deuda que el club todavía debe saldar, vinculada a un seguro de caución contratado para garantizar el pago de derechos de transferencia de jugadores, específicamente en el caso de los hermanos Mauro y Bruno Pittón.
Según fuentes cercanas, la deuda total de San Lorenzo con la aseguradora Galeno se estima en unos 1,6 millones de dólares (unos 1,43 millones de euros), aunque el monto que ahora se reclama corresponde a una parte específica del acuerdo que Tinelli asumió anteriormente.
La situación se desencadenó cuando el club recibió una comunicación formal de Galeno, en la cual se le notificaba que debía abonar la suma de 1,1 millones de dólares, correspondiente al vencimiento de un pago que debía realizarse en julio pasado según las condiciones del seguro de caución.
Este tipo de seguro es un contrato en el que la aseguradora se compromete a indemnizar a la parte asegurada, en este caso Unión, en caso de incumplimiento en las obligaciones del club respecto a transferencias o pagos contractuales.
El origen de este problema tiene raíces en la compra de los derechos de los hermanos Pittón, por la cual Unión de Santa Fe estableció un seguro de caución con Galeno, para garantizar que el pago se realizaría en tiempo y forma.
Sin embargo, por retrasos y problemas administrativos, la deuda quedó pendiente y derivó en esta reclamación formal.
Lo que hace particularmente complicado este episodio es que, para hacer frente a esta reclamación, Marcelo Tinelli, quien en su momento fue el máximo impulsor de varias gestiones de San Lorenzo, se vio obligado a responder con sus propios bienes.
Según se informó, le fueron embargadas cuentas bancarias personales, situación que refleja la gravedad y la seriedad de la deuda y las responsabilidades que aún recaen sobre su figura en relación con el club.
Este tipo de inconvenientes no son nuevos en la historia del fútbol argentino, donde trasfondos financieros y deudas pendientes suelenHabitar los ámbitos institucionales, generando crisis y conflictos internos.
San Lorenzo, como uno de los cinco grandes del fútbol argentino, ha tenido en el pasado problemas relacionados con la gestión y financiamiento, aunque en los últimos años intentó regularizar sus situaciones económicas.
El reclamo de la aseguradora Galeno, y la respuesta de Tinelli, ponen sobre la mesa la necesidad de revisar los contratos, las garantías y la gestión financiera del club, en un contexto donde la transparencia y la planificación a largo plazo son cada vez más imprescindibles para mantener la estabilidad y cumplir con las obligaciones económicas.
La incidencia de estos problemas también refleja la complejidad de administrar clubes de fútbol en Argentina, donde las deudas, los contratos y los seguros son parte de una realidad que afecta tanto a instituciones como a sus dirigentes y jugadores.
Por ahora, San Lorenzo está en una etapa de negociación para resolver esta deuda pendiente, mientras que el reclamo de Galeno continúa vigente, y la situación del club se mantiene bajo observación.
La historia reciente del fútbol nacional nos muestra que estas disputas financieras pueden retrasar proyectos deportivos y afectar la planificación a futuro, por lo que la resolución de este conflicto será crucial para la estabilidad del club en los próximos meses.