Tras la eliminación en los octavos de final de la Copa Libertadores, River Plate se prepara para el Mundial de Clubes con posibles refuerzos y un plan de recuperación deportiva. La dirigencia y el cuerpo técnico trabajan en la incorporación de jugadores clave para afrontar los próximos desafíos internacionales.

La derrota de River Plate frente a Platense en la última jornada de la Copa Libertadores generó una profunda desilusión en el equipo y su hinchada, tras haber tenido la oportunidad de avanzar a los octavos de final y aspirar a consolidar otra buena actuación internacional.

La eliminación en esa instancia, además de la frustración deportiva, interrumpió un período de buen rendimiento del equipo, que vinha mostrando signos positivos en los últimos meses.

La derrota también afectó la confianza del plantel en un momento clave de la temporada, justo antes del Mundial de Clubes, que se disputará en Estados Unidos en junio.

El entrenador Marcelo Gallardo expresó en conferencia de prensa su descontento por no haber podido seguir en carrera en la Libertadores, a pesar de que el equipo venía en un ritmo ascendente, con buenas sensaciones y resultados.

"Es una pena no poder continuar, pues veníamos con buen envión futbolístico. Pero esto no nos detendrá; seguimos adelante, trabajando en mejorar y prepararnos para afrontar con justicia los próximos desafíos," comentó el técnico.

Afirmó además que, aunque ahora la atención está enfocada en la preparación para el Mundial, lo importante es aprender de esta experiencia y mirar hacia adelante.

El plantel de River, que retomó los entrenamientos tras la caída ante Platense, se centrará en perfeccionar su estado físico y táctico en vistas a la participación en el Mundial de Clubes, que se disputará en Seattle, Los Ángeles y otras ciudades de EE.UU. La selección del equipo para el torneo se realizará en los próximos días, ya que la FIFA abrirá una ventana extraordinaria para inscripciones del 1 al 10 de junio.

Este proceso permitirá a los clubes reforzar sus plantillas, ajustando necesidades específicas en posiciones que requieran mayor solidez.

Según informes, Gallardo busca reforzar la línea defensiva y la zona ofensiva, especialmente en puestos donde el equipo mostró carencias durante la última parte de la temporada.

En particular, se analiza la incorporación de un lateral izquierdo y un delantero de impacto. En ese sentido, el club ya retomó las gestiones para intentar traer a Lucas Esquivel, jugador de Atlético Paranaense, con quien el entrenador mantiene buenas referencias y que estuvo cerca de llegar en el pasado.

Por la delantera, River apunta a Lucas Beltrán, futbolista que actualmente milita en Fiorentina y que, en su etapa formativa, surgió de las inferiores de River.

El interés en repatriarlo no solo radica en su capacidad goleadora, sino también en que ya conoce la filosofía del club y ha sido dirigido por Gallardo anteriormente.

Sin embargo, traer a Beltrán no será sencillo, dado que tiene contrato hasta mitad de 2028, y la operación requerirá de negociaciones complejas y acuerdos económicos.

El club argentino considera que contar con refuerzos de jerarquía será decisivo para mantener el nivel competitivo en el mundial y en la segunda parte de la temporada, que incluye la Copa Argentina, el torneo local y futuras competencias internacionales.

Además, también se evalúa la incorporación de un zaguero central de presencia para fortalecer la defensa, que ha mostrado altibajos en los últimos partidos.

En el contexto de la historia de River Plate, esta institución es uno de los clubes más importantes y exitosos del fútbol argentino y sudamericano, con múltiples títulos nacionales e internacionales, incluyendo varias Copas Libertadores y mundiales de clubes.

La ambición de la dirigencia y el cuerpo técnico es volver a disputar con éxito en el escenario mundial, consolidando además una plantilla competitiva para mantenerse en la élite del fútbol.

Tras la participación en el Mundial, River pretende mantener la senda de rendimiento que ha caracterizado su historia reciente, con el objetivo de reconquistar títulos y seguir siendo protagonista en el fútbol internacional.

La eliminación en la Libertadores, aunque constituye un golpe duro, también motiva a los jugadores y al cuerpo técnico para seguir trabajando en busca de éxitos futuros, con el respaldo de una hinchada que siempre acompaña y sueña con nuevas glorias.