Análisis del rendimiento de Marcelo Gallardo en la Copa Libertadores, con énfasis en sus enfrentamientos contra equipos brasileños y los retos que enfrenta River Plate en la competición.
Marcelo Gallardo, reconocido como uno de los entrenadores más destacados en la historia reciente del fútbol sudamericano, es sinónimo de éxito y historia en la Copa Libertadores.
Desde su llegada a River Plate, el entrenador ha logrado consagrarse en el máximo torneo internacional, conquistando dos títulos y llegando a una final más, demostrando su capacidad de afrontar los desafíos que presenta la competencia de clubes más importante de América.
Su filosofía de juego, basada en la intensidad y la ofensiva, ha sido clave en su paso por el banquillo millonario.
El compromiso de Gallardo con la Copa Libertadores es claro. Para él, competir en este torneo es una prioridad a comienzos de cada temporada, aunque reconoce que ganar no es tarea fácil. En una reciente declaración, afirmó: "Competir con fuerza en la Libertadores es nuestro objetivo principal, pero sabemos que un solo error puede costarnos caro en partidos decisivos.
La experiencia nos enseña a aprender de los errores y reducir el margen de error en las etapas más importantes".
No obstante, uno de los mayores obstáculos para River y Gallardo ha sido su enfrentamiento con equipos brasileños. La historia muestra que el técnico ha tenido dificultades para imponerse en estos duelos directos, especialmente en partidos jugados en el Monumental.
En total, Gallardo ha disputado 13 encuentros contra clubes brasileños en territorio local, logrando sólo 3 victorias, lo que evidencia las dificultades de River ante estos rivales.
Las victorias contra equipos brasileños en Libertadores son escasas y valiosas. La primera ocurrió en 2020, cuando River derrotó a San Pablo por 2-1 en la fase de grupos. En esa misma edición, también venció a Athletico Paranaense 1-0 en octavos. La última victoria en duelos de eliminación directa fue en 2022, con un 2-0 ante Fortaleza en la fase de grupos. Pero en la historia de los enfrentamientos en partidos decisivos, River sólo ha conseguido una victoria en series eliminatorias, frente a Athletico Paranaense.
Los desafíos de Gallardo en series de eliminación fueron variados. Disputó siete series en Núñez, con derrotas en cuatro ocasiones, incluyendo partidos ante Cruzeiro y Gremio en 2015 y 2018, respectivamente, así como frente a Palmeiras en 2020 y Atlético Mineiro en 2021.
Los partidos que terminaron en empate, sin goles, fueron contra Cruzeiro en 2019 y Atlético Mineiro en 2024. Estos números reflejan la complejidad de superar a los equipos brasileños en competencia internacional.
Su historial en fases de grupos también presenta altibajos, con resultados como un empate 1-1 contra San Pablo en 2016, un 0-0 frente a Flamengo en 2018, y un empate 2-2 contra Inter de Porto Alegre en 2019.
La derrota más dura en esa etapa fue un 1-3 contra Fluminense en 2021.
Un dato interesante es la final de 2019 contra Flamengo, disputada en Lima, donde River cayó 2-1. Este encuentro quedó marcado en la memoria de muchos aficionados, pues fue la última final en la que Gallardo participó. A pesar de las dificultades, uno de los aspectos que puede motivar a Gallardo es su capacidad para reponerse frente a estas adversidades. River ha logrado revertir resultados contra otros clubes brasileños como Cruzeiro en 2015 y 2019, y Gremio en 2018, demostrando que con estrategia y coraje, es posible superar los obstáculos.
Por otro lado, en su análisis previo a la próxima serie contra Palmeiras, Gallardo resaltó la importancia de jugar con inteligencia. El entrenador comentó que: "El partido será cerrado y no se definirá en el primer encuentro. Tenemos que mantener la calma y aprovechar la experiencia de partidos anteriores. Palmeiras es un equipo fuerte y con jugadores que no necesitan muchas oportunidades para marcar. Debemos estar atentos a sus réplicas y jugar con la misma intensidad que mostramos en partidos anteriores".
En conclusión, Marcelo Gallardo ha dejado una huella imborrable en la Copa Libertadores, con un historial lleno de altibajos frente a rivales brasileños.
Aunque sus números en duelos directos no sean favorables, su capacidad para aprender y adaptarse sigue siendo una de sus mayores virtudes. La historia del club y la experiencia del entrenador serán fundamentales en la lucha por avanzar en la edición actual del torneo, enfrentando nuevamente a la tradición y el desafío que representa el fútbol brasileño en la competencia continental.