El jugador del Inter Miami, Lionel Messi, manifestó su malestar con los árbitros en la MLS tras varias derrotas del equipo y un rendimiento que considera defectuoso, en medio de una serie de malos resultados. Además, destacó la importancia de la unidad del equipo en momentos difíciles y reclamó una mayor atención por parte de la liga en cuestiones arbitrales.

Tras la contundente derrota de su equipo, Inter Miami, por 3-0 ante Orlando City en un encuentro correspondiente a la Major League Soccer (MLS), Lionel Messi no escondió su descontento respecto al desempeño del árbitro principal, Guido Gonzáles Jr.

El capitán del conjunto estadounidense expresó su molestia no solo por esa jugada en particular sino también por lo que considera una tendencia de errores arbitrales en los últimos partidos que perjudican a su equipo y a la competencia en general.

Messi, quien recientemente se incorporó a la MLS procedente del FC Barcelona y uno de los jugadores más destacados y mediáticos en la historia del fútbol, comentó en una entrevista posterior al partido que su enojo también tiene raíces en experiencias previas, donde errores similares han incidido en los resultados.

En ese sentido, reclamó mayor atención y control por parte de la liga para evitar decisiones que, en su opinión, afectan la justicia deportiva.

Durante la charla con la transmisión de Apple TV, Messi hizo referencia a un episodio específico que marcó el partido. El primer gol de Orlando City, anotado en el minuto 43, ocurrió tras una jugada polémica en la cual un saque largo del arquero, Pedro Gallese, fue considerado por el árbitro como una cesión voluntaria, algo que para el argentino y otros observadores, no fue así.

La defensa de Inter Miami se quedó estática y el goleador Luis Muriel aprovechó la oportunidad para adelantar a su equipo y poner en ventaja a los locales.

"Hoy hicimos una buena primera parte. Estábamos atacando, generando oportunidades, y ellos no podían salir jugando. Solo tiraban pelotazos de largo", explicó Messi. "Pero en una jugada inusual, un jugador de Orlando le da un pase al arquero que el árbitro no vio claro, y eso nos perjudicó mucho. De ahí vino el gol y el cambio en el ritmo del partido".

Las decisiones arbitrales parecen ser un denominador común en la mala racha del equipo, que acumula cinco derrotas en los últimos siete encuentros disputados, incluyendo partidos de la MLS y competiciones de la CONCACAF.

La tensión quedó reflejada en el incidente ocurrido al final del partido contra San José Earthquakes, en el que Messi recriminó duramente al árbitro Joe Dickerson por no señalar una infracción en el área en tiempo de descuento.

La discusión terminó con una amonestación para el argentino, quien mostró un carácter fuerte y una clara actitud de rechazo a decisiones que, desde su perspectiva, son injustas.

A nivel de clasificación, Inter Miami ocupa actualmente la sexta posición en la Conferencia Este con 22 puntos en 13 partidos jugados. La próxima semana, los dirigidos por Javier Mascherano afrontarán un importante compromiso ante Philadelphia Union, líder de la conferencia con 29 puntos en 14 juegos, en busca de revertir su racha negativa y mejorar su rendimiento.

Messi destacó que el equipo debe confiar en su unidad y en la calidad de sus jugadores para afrontar estas adversidades; afirmó que en los momentos complicados es cuando se demuestra la verdadera fortaleza de un equipo.

Además, el delantero argentino señaló que cada derrota y cada problema deben servir como motor para seguir mejorando. Resaltó que en estos momentos difíciles, la unión y la convicción del grupo de jugadores son fundamentales para afrontar los desafíos que presenta la temporada y prepararse de la mejor manera para el Mundial de Clubes, una competencia que normalmente ayuda a elevar la moral y la visibilidad del fútbol en Estados Unidos.

En resumen, Messi busca que la liga estadounidense preste mayor atención a los errores arbitrales y a la justicia en el juego. A la vez, insiste en la importancia de la concentración y el trabajo de equipo para superar los obstáculos. Con su liderazgo y experiencia, el argentino continúa siendo una figura clave para mover los objetivos deportivos de Inter Miami y para elevar el nivel del fútbol en la MLS, una liga en plena expansión que aspira a convertirse en una de las principales del mundo.

La mejora en la calidad arbitral, desde su punto de vista, sería un paso decisivo para lograr un juego más justo y competitivo en la región.