Los futbolistas argentinos mostraron su estilo en Ezeiza, combinando prendas casuales con accesorios de alta gama, marcando tendencia en el mundo del deporte y la moda.
La llegada de los miembros de la Selección Argentina a Buenos Aires, en el contexto de las Eliminatorias Sudamericanas, capturó la atención no solo por los partidos que se disputarán, sino también por el impacto que los jugadores tuvieron en materia de moda y estilo.
Durante su paso por el predio de Ezeiza, los futbolistas no solo demostraron su talento en el campo, sino que también dejaron huella con sus atuendos y accesorios de lujo, reafirmando que la moda en el deporte se ha convertido en una parte esencial de su imagen pública.
Lionel Messi, capitán y figura emblemática del equipo, fue uno de los protagonistas en términos de estilo. Su elección de vestimenta fue un ejemplo de sobriedad pero con un toque sofisticado: un conjunto total black compuesto por pantalones anchos, una camisa y una chaqueta ligera a juego, complementado con las clásicas zapatillas Adidas Superstar negras con tiras blancas.
Sin embargo, lo que realmente llamó la atención fue el bolso Hermès, con detalles en negro, valorado en aproximadamente 22.000 euros, un accesorio que solo algunas celebridades y artistas de renombre pueden permitirse. La imagen de Messi arribando a Ezeiza con este bolso de lujo se viralizó rápidamente en redes sociales, reforzando su estatus como ícono de estilo global.
Por otro lado, Rodrigo De Paul optó por una vestimenta deportiva y moderna. Eligió un conjunto de Adidas en negro con franjas blancas, gorra de espalda y zapatillas de diseño exclusivo. El toque distintivo fue su bolso multicolor Louis Vuitton, una pieza urbana y funcional, que ha consolidado como un clásico en su guardarropa. De Paul ha declarado en varias entrevistas su pasión por la moda, y decidió incorporar tendencias de los años 90, como el estilo oversize, dejando atrás el skinny y slim fit que dominaban épocas anteriores.
Leandro Paredes optó por un estilo relajado pero con guiños de moda contemporánea, portando un buzo claro, jeans oversize de Loewe, cuyo valor ronda los 9.200 euros, y un bolso Hermès negro, similar al de Messi pero con un look más sobrio y discreto. La presencia de un muñeco Labubu, de la firma asiática Pop Mart, colgado de su cartera llamó la atención por ser un detalle innovador. Este juguete, que combina ternura con estética monstruosa, refleja cómo los futbolistas están atentos a las tendencias en accesorios de moda y cultura pop.
Julián Álvarez, conocido por su comodidad, llegó con un conjunto beige estilo canguro, luciendo prendas fáciles de llevar y cómodas. En línea con sus compañeros, Thiago Almada llevó un conjunto relajado pero con estilo: chaqueta liviana, jeans celeste, zapatillas blancas y un bolso Louis Vuitton, valorado en unos 8.600 euros, que se ha convertido en uno de los accesorios favoritos de los jóvenes jugadores.
Otros futbolistas, como Julio Soler, actualmente en el Bournemouth, también se sumaron a la tendencia con un look total negro, manteniendo la preferencia por la paleta oscura.
La incorporación de accesorios de lujo, como bolsos de marcas como Hermès y Louis Vuitton, refleja una evolución en la estética del fútbol argentino, donde la moda y el estilo personal juegan un papel cada vez más importante.
Este cambio no es casual. Desde la historia del fútbol, hemos visto que los jugadores siempre han sido iconos de estilo en sus épocas, pero en la actualidad, esta tendencia se ha fortalecido con la influencia de las redes sociales y la cultura de la exclusividad.
Las marcas de lujo se han convertido en un símbolo de estatus y reconocimiento, y los futbolistas argentinos parecen estar en la vanguardia de esta tendencia.
El estilo de los jugadores en Ezeiza no solo refleja su personalidad, sino que también marca un camino en la moda deportiva, mostrando que el deporte y la alta-costura cada vez están más conectados.