River Plate dejó una imagen decepcionante en su visita a Junín, donde logró solamente un empate contra Sarmiento en un partido correspondiente a la fecha 12 del Torneo Apertura.

El equipo dirigido por Marcelo Gallardo venía de conseguir un triunfo en la Copa Libertadores, pero no pudo repetir su éxito en el campeonato local.

El partido, que se jugó el sábado por la noche, comenzó con expectativas altas para los hinchas del Millonario, que buscaban un triunfo que los acercara a la cima de la Zona B.

Los líderes, Rosario Central e Independiente, miraban de cerca a sus competidores, y River esperaba reducir la distancia. Sin embargo, el resultado final lo dejó en la cuarta posición, por detrás también de San Lorenzo, lo que genera dudas sobre las capacidades del equipo de cara a las próximas fechas.

Miguel Borja fue elegido como referente en el ataque, y el colombiano se hizo notar al marcar el primer gol del encuentro a los 29 minutos, gracias a un preciso centro de Franco Mastantuono.

Este tanto significó un alivio en su racha de seis partidos sin convertir, pero la alegría duró poco.

A poco de finalizar la primera mitad, una falla defensiva permitió que Juan Manuel Insaurralde empatara para Sarmiento, tras capitalizar un rebote en el área.

El experimentado defensor, con décadas en el fútbol argentino, demostró su olfato goleador.

El segundo tiempo trajo cambios en el equipo de Gallardo, quien realizó varias sustituciones en busca de mejorar el rendimiento del conjunto. Sacó a Mastantuono, Ian Subiabre y Nacho Fernández, dando lugar a Facundo Colidio, Maximiliano Meza y Matías Rojas. Sin embargo, estos cambios no lograron el impacto deseado, y River no pudo encontrar el camino para conseguir la victoria. Franco Armani, el arquero millonario, se convirtió en un salvador, realizando intervenciones cruciales que mantuvieron el marcador igualado ante los embates del rival.

La oportunidad más clara del partido llegó cuando Colidio fue derribado en el área, pero el VAR intervino y corrigió el error del árbitro, anulando el penal aparentemente a favor de River.

En las instancias finales, Driussi tuvo una chance notable para desnivelar el encuentro, pero el arquero rival, Lucas Acosta, impidió el gol.

A pesar de los intentos finales y de la presión ejercida, River se retiró de Junín con un sabor amargo y la sensación de que las posibilidades de alcanzar los primeros puestos se complican, justo cuando el torneo entra en su fase decisiva.

La próxima cita será clave para el equipo, que necesita reencontrarse con la victoria y seguir en la pelea por el campeonato, lo que para muchos aficionados evoca recuerdos de épocas doradas donde River habitualmente se encontraba en la conversación por los títulos.

Con cuatro fechas restantes, los hinchas esperan que la respuesta del equipo sea contundente ante la adversidad, y que Marcelo Gallardo logre dar con la fórmula para recuperar el nivel que los llevó a ser protagonistas en los torneos pasados.