La selección de Jordania logró su pase a la final de la Copa Árabe tras vencer a Arabia Saudita en semifinales, demostrando un gran nivel sin contar con su principal figura, Yatan Al Naimat. El torneo se disputa en Qatar y tiene implicaciones importantes de cara al Mundial 2026.

Desde el sorteo del 5 de diciembre, cuando se conocieron las distribuciones de los grupos para el Mundial 2026, la selección de Jordania comenzó a captar la atención debido a su clasificación en el Grupo J junto a países como Argentina, Austria y Argelia.

Aunque primero fue vista como la combinación más débil, el equipo jordano ha demostrado que puede sorprender incluso a los rivales con más trayectoria.

El equipo árabe, que participa en la Copa Árabe, ha dado una muestra de su poderío en una competición en la cual no contaba con su capitán y goleador Yatan Al Naimat.

El delantero sufrió una grave lesión de ligamentos en larodilla durante el partido contra Irak, lo que lo deja fuera de la mayor parte del camino hacia el Mundial.

La lesión requiere una intervención quirúrgica y el proceso de recuperación oscila entre seis y ocho meses, lo que hace difícil que pueda estar disponible para los primeros encuentros contra Austria, Argelia y Argentina en Estados Unidos.

La semifinal ante Arabia Saudita fue el gran momento de Jordania en el torneo. El equipo del Oriente Medio logró una victoria por 1-0, con un gol de cabeza del volante Nizar Al-Rashdan, jugador del club jordano Al-Faisaly, a los 66 minutos del partido.

La selección jordana, que suele tener un perfil discreto en el escenario internacional, supo aprovechar las oportunidades y se impuso a un equipo saudí que también competía sin varias de sus figuras principales.

Arabia Saudita, que llegaba a esta instancia con aspiraciones de coronarse campeón y que fue verdugo de Argentina en su debut en Qatar 2022, no pudo hacer mucho ante el esquema compacto de Jordania.

La victoria no solo significó la clasificación a la final de la Copa Árabe, sino que también elevó la moral del equipo en su preparación para las eliminatorias mundialistas.

El próximo 18 de diciembre, en el Estadio Lusail de Qatar, Jordania buscará levantar su primer título importante frente a Marruecos, que en la otra semifinal venció 3-0 a sus rivales emiratíes.

Este torneo sirve como una antesala de lujo para los equipos que pelearán en el Mundial, además de ofrecerles la oportunidad de realizar pruebas y consolidar plantillas.

Marruecos, que también ha mostrado un excelente rendimiento en esta copa, aparece como favorito para coronarse en la final. Los marroquíes, que están en plena preparación para la Copa Africana de Naciones que iniciará el 21 de diciembre en su propio país, alinearon un equipo 'B' en el torneo árabe, con figuras ausentes como Achraf Hakimi y Yassine Bounou, quienes pronto se unirán para afrontar el compromiso continental.

En suma, Jordania no solo ha logrado una hazaña contra un rival de peso, sino que también ha enviado un mensaje fuerte respecto a su potencial en la élite del fútbol árabe y mundial.

Con una serie de partidos consecutivos ganados en Qatar y sin contar con su máxima estrella, el equipo jordano se consolida como una de las sorpresas del torneo.

Si logra coronarse en esta copa, será una muestra más de que en el fútbol, la mínima oportunidad puede abrir grandes puertas para equipos que no cuentan con grandes estrellas, pero sí con mucho talento y espíritu competitivo.

Este logro de Jordania refleja el crecimiento del fútbol en la región, que cada vez gana más protagonismo y demuestra que la competencia en el escenario internacional no solo depende del brillo individual, sino también del trabajo en equipo y la estrategia coordinada en busca de la gloria.