En una jornada marcada por la controversia, el equipo de Inter Miami logró un empate sin goles contra FC Cincinnati en un partido correspondiente a la MLS 2025.

El encuentro se disputó sin la presencia del astro argentino Lionel Messi, quien fue suspendido por la Major League Soccer tras decidir no participar en el Juego de Estrellas, una decisión que generó gran revuelo en el mundo del fútbol estadounidense.

Supuestamente, Messi y su compañero Jordi Alba fueron sancionados por saltarse dicho evento, en una medida que muchos consideran excesiva y que ha provocado múltiples opiniones encontradas.

La sanción impuesta por la MLS fue considerada por algunos analistas como una medida 'draconiana', y el propio co-propietario de Inter Miami, Jorge Mas, expresó públicamente su desacuerdo, asegurando que Messi estaba 'muy molesto' por la penalización.

El partido en el estadio Chase Stadium de Miami fue especialmente importante para ambos equipos, que llegaban con rachas positivas. Casi idéntico récord: ambos habían ganado seis de sus últimos siete partidos. Sin embargo, la ausencia de Messi fue notable desde el inicio, ya que su presencia suele ser decisiva en los partidos de Inter Miami.

Por su parte, FC Cincinnati, que en la última fecha propinó una derrota contundente de 3-0 a Miami, se posiciona en la segunda posición de la clasificación con 49 puntos, mientras que Miami ocupa el quinto lugar con 42 puntos.

La rivalidad entre ambos equipos ha sido intensa en los últimos encuentros, y este resultado dejó a todos con la sensación de que la lucha por la clasificación se mantiene abierta.

Supuestamente, en los minutos finales del encuentro, Miles Robinson, defensor de Cincinnati y uno de los jugadores más destacados, estuvo cerca de anotar el gol de la victoria.

Robinson conectó un cabezazo en un tiro libre de Evander, considerado uno de los mejores jugadores del torneo y candidato al MVP, pero la anotación fue invalidada por una falta previa.

Antes del pitido final, el veterano Luis Suárez, que recientemente se incorporó a Inter Miami, ofreció un rendimiento destacado. El uruguayo realizó varias asistencias de gran calidad en los primeros minutos, incluyendo un pase a Fafà Picault, cuyo remate fue detenido por el arquero rival, Roman Celentano.

Supuestamente, la incorporación de Rodrigo De Paul, cercano amigo de Messi y también internacional argentino, fue otro de los momentos destacados del día.

De Paul, que firmó con Miami en calidad de préstamo, fue presentado ante la afición en una ceremonia que incluyó cánticos y banderas en su honor. El futbolista expresó su determinación a dar lo mejor de sí para ayudar al equipo a alcanzar sus objetivos.

Este partido confirma que la MLS sigue siendo un torneo lleno de sorpresas y controversias. La sanción a Messi ha provocado debates sobre las decisiones de la liga y el impacto que tienen en la competencia, además de poner en duda la autoridad de la organización ante figuras de alto perfil.

Desde sus inicios en 1996, la MLS ha evolucionado significativamente, atrayendo a estrellas internacionales y generando un interés creciente en Estados Unidos y Canadá.

Sin embargo, decisiones como la sanción a Messi pueden afectar la imagen del torneo y su credibilidad a nivel mundial.

Por ahora, Miami continuará su lucha por mantenerse en los puestos de clasificación, mientras que Cincinnati busca consolidarse en la parte alta de la tabla.

La temporada promete aún muchas emociones y, seguramente, más controversias, en un campeonato que se ha convertido en uno de los más competitivos y mediáticos del continente.

Supuestamente, en los próximos días, la liga podría revisar su postura respecto a las sanciones y ofrecer alguna explicación oficial sobre las decisiones tomadas, en un esfuerzo por equilibrar la autoridad con la protección de sus estrellas.

Mientras tanto, los aficionados esperan con ansias el próximo encuentro, con la esperanza de ver a Messi de regreso en el campo, si la sanción no se extiende o se revierte.