La preparación de las selecciones nacionales de fútbol de España y Francia para el Mundial de 2026 ha evidenciado una significativa tendencia hacia la juventud y la renovación de sus plantillas.

En los últimos tres años, ambos equipos han reducido de manera marcada sus edades promedio, en un proceso que busca aprovechar la energía y el potencial de las nuevas generaciones.

España, actual campeona de la Eurocopa 2024, ha visto disminuir su edad promedio de manera notable. En el último torneo, el plantel convocado tenía un promedio de aproximadamente 25 años, con jugadores como Lamine Yamal, que con solo 17 años mostró su talento en partidos decisivos.

La escuadra que conquistó la Euro en 2024 tenía una media de 26 años en Qatar 2022, por lo que en solo un año y medio bajó su edad en más de un año completo, señalando una apuesta por un equipo más joven y dinámico.

El proceso de rejuvenecimiento no solo involucra a los jugadores jóvenes, sino también a la incorporación de talento emergente y a la reducción de la edad media en los convocados.

De hecho, la selección actual de España, que participa en el Final Four de la Nations League, mantiene un promedio de edad de 25 años en su núcleo principal, teniendo en cuenta a los jugadores que ingresaron desde el banco.

Además, si se consideran los 26 futbolistas invitados en la convocatoria, la edad promedio se sitúa en torno a los 23 años y 4 meses, un dato que refleja la intención de seguir apostando por un proyecto a largo plazo con base joven.

Por su parte, Francia, que fue subcampeona en Qatar 2022, también ha llevado a cabo una estrategia similar. El elenco que arrancó en la semifinal del último torneo continental tenía un promedio de 26 años y 5 meses, pero tras realizar cuatro cambios en su alineación, el promedio se redujo a 26 años y 1 mes.

La selección cuenta con figuras jóvenes como Désire Doué, con apenas 20 años y 2 días, y veteranos como Adrián Rabiot, de 30 años. La media de edad del equipo actual, contando a todos los convocados, se sitúa en los 24 años y 11 meses.

El análisis de las estadísticas de ambos países indica que, en comparación con sus plantillas en Qatar 2022, los equipos han reducido su edad promedio en aproximadamente un año y medio a dos años.

La selección española pasó de tener una media de 26 años y 9 meses en la Eurocopa 2024, en tanto que la francesa tuvo una media de 26 años y 9 meses en el mismo período.

Este proceso de renovación apunta a un objetivo común: llegar más preparados y con mayor potencial competitivo al Mundial de 2026, que se disputará en Estados Unidos, Canadá y México.

Históricamente, las selecciones nacionales han tenido ciclos de renovación en función de sus objetivos deportivos y la generación de talento emergente.

La tendencia actual refleja un enfoque más agresivo hacia la juventud, buscando aprovechar la proyección internacional de jugadores que ya comienzan a destacarse en ligas europeas.

La evolución de estos equipos indica que, en los próximos años, tanto España como Francia seguirán apostando a un perfil más joven para adaptarse a los requerimientos de un fútbol cada vez más rápido y dinámico en el escenario mundial.