La selección croata se clasifica para el Mundial 2026 tras vencer a Islas Feroe en un ajustado encuentro, consolidándose como uno de los equipos destacados en la fase de clasificación europea.

Croacia ha sellado oficialmente su boleto para participar en la próxima edición de la Copa del Mundo, que se disputará en 2026 en Estados Unidos, Canadá y México.

Con una condición inédita en la historia del torneo, este Mundial contará con la participación de 48 equipos. La selección croata, conocida por su talento y espíritu competitivo, confirmó su clasificación tras un triunfo por 3-1 ante las Islas Feroe el pasado viernes.

El partido, que se disputó en Rijeka, fue crucial para el equipo europeo, que necesitaba al menos un punto para asegurar su presencia en la fase mundialista.

La victoria no solo marcó un hito en la historia de Croacia, sino que también reafirmó su condición de una de las selecciones más relevantes del continente en los últimos ciclos.

Croacia había llegado a esta fase con el mérito de haber alcanzado la final en Rusia 2018 y las semifinales en Qatar 2022, donde fue eliminada por Argentina en una emocionante serie de eliminaciones.

El choque ante las Islas Feroe empezó con dominio de los croatas, quienes mantuvieron la posesión del balón y buscaban desplegar su juego ofensivo.

Sin embargo, los visitantes generaron peligros en contraataques, logrando abrir el marcador a los 16 minutos mediante Geza Dávid Turi, cuyo remate rebotó en Luka Vušković y descolocó al arquero dominicano Livakovic.

Por momentos, pareció que Croacia podría sufrir un batacazo, pero rápidamente reaccionó.

Solo siete minutos después, Josko Gvardiol, defensor que hizo historia en Qatar 2022 tras un memorable amague contra Messi, logró igualar el marcador con un disparo cruzado en el área tras un rebote.

A partir de ese momento, el equipo europeo tomó las riendas del encuentro, generando numerosas ocasiones.

Ya en la segunda mitad, Petar Musa puso en ventaja a Croacia con un remate desde fuera del área que encontró el arco rival, y Nikola Vlašić cerró la cuenta en el minuto 85, anotando con un disparo al segundo palo.

La actuación del veterano Luka Modric fue fundamental, ya que con su experiencia y liderazgo, logró asegurar la clasificación para su quinta Copa del Mundo, a los 40 años.

Este logro se suma a la historia de Croacia, que ha tenido un crecimiento notable en los torneos internacionales. Desde su debut en 1998, la selección europea ha ido consolidando su lugar entre las mejores del mundo, llegando a la final en su primera participación en Francia 1998, y logrando un tercer puesto en el Mundial de 1998, además de su reciente protagonismo en los certámenes de Rusia y Qatar.

En otros partidos del día, Países Bajos empató 1-1 con Polonia en Varsovia, resultado que mantiene a los neerlandeses en cabeza del grupo G, con una ventaja de tres puntos y una diferencia de goles que, por ahora, favorece a los tulipanes.

Memphis Depay marcó su gol número 43 con la selección, capturando un rebote y estableciendo el empate.

Mientras tanto, Alemania venció 2-0 a Luxemburgo con un doblete de Nick Woltemade en la segunda mitad, y Eslovaquia aseguró su pase tras derrotar 1-0 a Irlanda del Norte.

Ambos equipos comparten ahora 12 puntos en la clasificación, y definirán su clasificación en un enfrentamiento directo el próximo lunes en Leipzig, donde la igualdad beneficia a los alemanes por su mejor diferencia goleadora.

Con estos resultados, las eliminatorias europeas siguen acercando a los mejores equipos hacia la tan esperada Copa del Mundo, que promete ser una de las más grandes de la historia, tanto por la expansión de participantes como por el nivel del juego que seguramente ofrecerán los clasificados.

Croacia, con su talento consolidado y veteranía, buscará repetir sus hazañas y dejar una vez más huella en la máxima competición mundial del fútbol.