Los exdirigentes del fútbol, Michel Platini y Joseph Blatter, han sido absueltos de las acusaciones de fraude tras un juicio de apelación sobre un polémico pago.
En un fallo que marca un hito en la historia del fútbol, el expresidente de la UEFA, Michel Platini, y el expresidente de la FIFA, Joseph Blatter, han sido exonerados de las acusaciones de fraude por un monto de 1,6 millones de euros, según lo establecido por el Tribunal Penal Federal de Suiza.
Esta resolución llega casi diez años después del inicio de una extensa investigación sobre el escándalo conocido como FIFAgate, que sacudió los cimientos del balompié mundial.
La controversia se centra en un pago que se realizó en 2011, por un total de 2 millones de francos suizos (aproximadamente 1,6 millones de euros), que Blatter aprobó en favor de Platini.
El exdirigente suizo argumentó que este desembolso era parte de un salario acordado verbalmente con Platini, quien había sido su asesor y ocupó el cargo de presidente de la UEFA entre 2007 y 2015.
Según Blatter, el acuerdo se alcanzó en 1998, sin ningún tipo de documentación escrita que lo respaldara.
La Fiscalía suiza había apelado un fallo anterior que también había absuelto a ambos dirigentes, sosteniendo que habían utilizado su influencia en la FIFA y la UEFA para llevar a cabo un desvío de fondos.
La vista de esta apelación tuvo lugar el 6 de marzo, y el veredicto se hizo público recientemente, ratificando la inocencia de ambos.
El caso ha tenido un impacto significativo en el mundo del fútbol, afectando las ambiciones de Platini de convertirse en presidente de la FIFA, puesto al que aspiraba tras la renuncia de Blatter en junio de 2015 después de un escándalo que resultó en la detención de varios directivos de la FIFA por corrupción.
La cuestión del pago en cuestión volvió a tomar protagonismo en 2015, cuando Platini emergió como el principal candidato para suceder a Blatter, lo que llevó a cuestionar la validez del acuerdo verbal que ambos habían establecido.
Este evento se enmarca en un contexto más amplio en torno a FIFAgate, uno de los escándalos de corrupción más notorios en la historia del fútbol.
Desde 2015, las investigaciones han revelado una red de sobornos y manipulación de fondos que involucró a altos funcionarios de la FIFA. Este escándalo despertó la atención internacional, provocando detenciones, así como procesos judiciales que culminaron en la renuncia de importantes figuras del fútbol, incluida la del propio Blatter.
Las revelaciones han mostrado cómo se moldearon decisiones cruciales, como la concesión de derechos de transmisión y la elección de sedes para torneos de renombre, entre los que se incluye el Mundial de Qatar y la Copa América.
En total, alrededor de 14 personas, incluido el alto mando de la FIFA, han sido acusadas de diversos delitos desde que se iniciaron las investigaciones por el FBI y el Tesoro de Estados Unidos.
El caso ha quedado como un recordatorio de la necesidad de transparencia y culpa dentro de las organizaciones deportivas globales, y la reciente absolución de Platini y Blatter podría poner fin a un capítulo tumultuoso en la historia del fútbol, aunque las repercusiones de FIFAgate continúan resonando en el presente.