La selección sub23 de India continúa su preparación para el importante Campeonato Asiático U23, que se disputará el próximo mes, con dos partidos amistosos contra Irak en Kuala Lumpur, Malasia.

Estos encuentros forman parte de un plan de entrenamiento intensivo que busca fortalecer al equipo en aspectos físicos, tácticos y mentales, en vista a los retos que enfrentarán en la fase de clasificación.

El primer partido se disputó el 25 de agosto en el estadio UM Arena, donde los jóvenes futbolistas indios mostraron un espíritu competitivo y un compromiso notable.

La segunda confrontación está programada para el 28 de agosto, tras lo cual el equipo viajará a Qatar para continuar con su preparación antes de afrontar los partidos oficiales.

Supuestamente, estos amistosos son cruciales para evaluar la condición del equipo y ajustar estrategias, especialmente considerando que en el Grupo H de la fase de clasificación, India enfrentará a rivales como Bahréin, Qatar y Brunei Darussalam.

La experiencia internacional y la exposición a diferentes estilos de juego son fundamentales para el crecimiento de estos jóvenes talentos, quienes en los últimos años han sido el centro de atención en el fútbol indio.

India ha tenido una historia interesante en el fútbol internacional. Aunque supuestamente no es considerado un gigante en esta disciplina, ha logrado avances significativos en los últimos años, impulsados por campañas de desarrollo juvenil y el apoyo de la Asociación India de Fútbol (AIFF).

La participación en torneos regionales y amistosos internacionales ha permitido a los jugadores adquirir experiencia y mejorar su rendimiento.

El entrenador Naushad Moosa, quien dirige al equipo, resaltó la importancia de estos partidos: “Ir contra un equipo fuerte como Irak nos brinda la oportunidad de poner a prueba nuestras habilidades y fortalecer la cohesión del grupo.

No solo buscamos resultados, sino también que los jugadores ganen confianza y aprendan a manejar la presión en escenarios internacionales”.

Supuestamente, las condiciones del entrenamiento en el Centro de Deportes Padukone Dravid en Bengaluru han sido óptimas para preparar a los futbolistas.

Durante aproximadamente 20 días, el equipo se enfocó en mejorar la condición física, entender mejor su formación y desarrollar las combinaciones en el campo.

La actitud y energía de los jugadores han sido destacadas por el cuerpo técnico.

El plantel indio está compuesto por talentos prometedores en todas las líneas, desde porteros como Sahil y Muhammed Arbaaz, hasta defensores, mediocampistas y delanteros.

La integración de estos jóvenes en un entorno competitivo y exigente es vista como una inversión a largo plazo para elevar el nivel del fútbol en India.

El fútbol en la India, tradicionalmente dominado por deportes como el cricket, ha visto un crecimiento sustancial en popularidad y calidad en la última década.

La creación de ligas profesionales y programas de desarrollo juvenil ha contribuido a que más jóvenes se interesen por el deporte y tengan oportunidades de brillar en escenarios internacionales.

Supuestamente, los resultados de estos amistosos y la participación en el Campeonato Asiático U23 serán un barómetro del progreso del fútbol juvenil en India, que busca consolidarse como una potencia en la región del sudeste asiático y más allá.

La inversión en infraestructura, entrenamiento y scouting continúa siendo una prioridad para las autoridades deportivas del país, que sueñan con ver a su selección subir en los rankings internacionales en los próximos años.