La reciente transferencia de Maximiliano Salas desde Racing Club a River Plate ha sido uno de los temas más destacados en el mercado de pases del fútbol argentino durante el invierno de 2025.

La salida del delantero chileno generó diversas reacciones en Avellaneda, aunque los hinchas de River prefirieron centrarse en las actuaciones del nuevo jugador.

En su debut oficial con el conjunto Millonario, Salas no solo dejó una buena impresión, sino que también anotó su primer gol con la camiseta del club, en una jugada que quedó grabada en la memoria de los espectadores.

El primer tanto de Maxi Salas, como es conocido entre los hinchas, fue un ejemplo claro de la potencialidad del delantero para convertir en momentos clave.

La jugada fue una demostración de juego colectivo, algo que River había mostrado en contadas ocasiones en los últimos partidos, especialmente durante la era liderada por Marcelo Gallardo.

Tras recibir el balón, Salas culminó con un disparo preciso después de una secuencia de ocho toques consecutivos en el campo rival, controlando cada uno en primera instancia.

La ejecución perfecta, acompañada de su característico gesto, el “Matador” en honor a la leyenda del club Marcelo Salas, hizo despertar el entusiasmo en la parcialidad riverplatense.

El futbolista, quien viste el número 7 en su camiseta, expresó tras el encuentro su satisfacción por el rendimiento colectivo y personal: “Estoy muy feliz, fue un gran partido y un debut que recordaré siempre.

Siempre hay detalles para mejorar, pero empezar así es muy importante. Como delantero, mi objetivo es dejarlo todo en cada partido; si anoto o no, eso pasa a un segundo plano”.

Sobre su polémica salida de Racing y los rumores que rodearon su traspaso, Salas fue directo: “No quiero meterme en cosas del pasado, ya cerré ese capítulo.

Ahora mi foco está en ayudar a River a lograr buenos resultados”. La historia del delantero en River se ha escrito en un momento especial, ya que no es solo su debut, sino el comienzo de una posible etapa dorada en su carrera.

Curiosamente, en la historia del fútbol argentino también existen otros jugadores con el apellido Salas. En los años 50, Ramón Alberto Salas disputó un solo encuentro oficial en la Copa Suecia de 1958, dejando huella en Talleres de Córdoba y otros clubes menores.

La tradición de jugadores con ese apellido, aunque escasa, siempre ha estado marcada por su capacidad goleadora. Además, en el reciente torneo de apertura de 2025, River también tuvo una destacar con Matías Rojas, quien en su debut anotó en un empate 1-1 contra Platense, rompiendo una racha de más de cinco años sin debutantes que marcaran en su primer partido.

El fútbol argentino, con su historia rica en goles y figuras legendarias, siempre se renueva con nuevas promesas. Maxi Salas, con solo 25 años y una trayectoria ascendente, ahora pretende consolidarse en River y devolver a la hinchada la ilusión de disfrutar a un goleador auténtico.

La historia del club, que ha sido hogar de jugadores emblemáticos en distintas épocas, ahora se enriquece con su figura, y los fanáticos esperan que este sea solo el comienzo de una exitosa etapa en su carrera deportiva.