El mediocampista argentino, que volvió a vestir la camiseta de Boca tras 11 años, mostró su talento en su reestreno, aportando en la igualdad ante Unión y expresando su entusiasmo por seguir mejorando en el club.
Leandro Paredes realizó su esperado regreso a Boca Juniors y, en su primera participación como titular, mostró destellos de su calidad y experiencia, a pesar de contar con pocos días de entrenamiento tras su incorporación.
En apenas unos minutos en el campo, el mediocampista, que se esperó en el banco, fue decisivo al colaborar en la jugada que derivó en el empate 1-1 contra Unión, gracias a un preciso centro desde un tiro de esquina que Lautaro Di Lollo convirtió en gol.
Este partido representó un momento muy especial para Paredes, quien agregó en diálogo con El Canal de Boca que se siente en mejor condición de la que esperaba después de un largo descanso y de entrenar poco con sus nuevos compañeros.
“Estoy mejorando tras unas vacaciones prolongadas y, aunque todavía me falta ritmo, espero seguir progresando para poder aportar más al equipo”, afirmó con entusiasmo.
Paredes, mediocampista con experiencia en clubes de elite como Roma y PSG, y campeón del mundo con Argentina en 2022, expresó que la decisión del director técnico, Miguel Ángel Russo, de mantenerlo en el banco y darle minutos fue motivada por la observación y confianza en su rendimiento en los entrenamientos.
“No fue necesario que hablemos mucho, Miguel me vio en el campo y que me sentí cómodo. Creía que podía aportar en esos minutos”, explicó.
El futbolista también reflexionó sobre la situación del equipo y su futuro inmediato. “Hay jugadores de mucha calidad y sé que podemos jugar mucho mejor. Necesitamos mejorar en muchos aspectos, sobre todo en cómo enfrentamos a equipos que se cierran. Los laterales y la organización en general serán fundamentales para progresar”, agregó.
Su regreso a Boca, tras 11 años de ausencia, no fue solo una cuestión deportiva, sino también emocional. “Pasaron muchos años, y volver a ponerme esta camiseta fue una pasión que llevaba mucho tiempo esperando. La emoción de volver a jugar en esta cancha y con esta camiseta es indescriptible”, expresó. Paredes confiesa que no fue solo un sueño personal, sino también una celebración familiar, especialmente por la alegría de su hija, familiares y amigos que lo acompañaron en este momento especial.
El jugador reveló que en su corazón siempre estuvo presente el deseo de volver y, aunque el resultado del partido no fue el esperado, se lleva una experiencia valiosa y la motivación de seguir mejorando en el club.
“Disfruté mucho de volver, de sentir el cariño de la gente y de compartir con colegas y amigos. Esto para mí es muy importante”, concluyó.
Con un valor aproximado de 55 millones de euros, la transferencia de Paredes a Boca representa también una inversión significativa para el club, que busca fortalecer su plantel en la lucha por los títulos locales e internacionales.
Su incorporación aporta experiencia, liderazgo y la posibilidad de contribuir a que Boca recupere su protagonismo en la máxima división del fútbol argentino.