La Comisión de arbitraje argentina confirmó a los árbitros para la segunda jornada del torneo Clausura, a pesar de las controversias de la primera fecha, incluyendo errores destacados y decisiones polémicas. Además, el responsable Federico Beligoy observó la final del Mundial de Clubes en Nueva Jersey junto a la presidenta de la AFA.

Tras la primera jornada del torneo Clausura de la Primera División argentina, la Dirección Nacional de Arbitraje, liderada por Federico Beligoy, decidió no realizar cambios en su plantel arbitral.

A pesar de los errores y controversias que marcaron la apertura del campeonato, todos los árbitros permanecen en sus puestos y estarán en actividad en la próxima fecha.

Uno de los casos más destacados fue el de Pablo Dóvalo, quien cometió un error grave en un penal en el partido entre Rosario Central y Godoy Cruz, que desembocó en un gol de Ángel Di María para la visita.

Este error generó fuertes críticas y se convirtió en tema de discusión entre los analistas, aunque para esa jornada, Dóvalo fue designado para arbitrar el enfrentamiento entre Defensa y Justicia y Aldosivi.

El VAR también estuvo en el centro de las polémicas. Gastón Monsón Brizuela, quien supervisa las revisiones en la cabina, no fue convocado para revisar la situación específica, y en otro caso, Nicolás Lamolina sancionó un penal para Barracas Central frente a Racing tras una revisión del VAR, lo que provocó la incomodidad del técnico Gustavo Costas, quien fue expulsado debido a la fuerte protesta.

La utilización del VAR en el fútbol argentino continúa siendo un tema de debate. La tecnología ha contribuido a reducir errores, pero también ha generado nuevas controversias, especialmente cuando las decisiones no son concluyentes o la revisión no se realiza de manera efectiva.

En la primera jornada, algunos árbitros, como Hernán Mastrángelo, también estuvieron en el centro de las críticas por decisiones cuestionadas.

Beligoy, actualmente en Nueva Jersey, observando la final del Mundial de Clubes entre Chelsea y París Saint-Germain, junto a Claudio Tapia, presidente de la AFA, mantuvo una postura de respaldo a sus oficiales.

La presencia de Beligoy en Estados Unidos no ha impedido que el arbitraje argentino se mantenga en una posición de confianza, aunque las polémicas recientes han generado llamados a mejorar la capacitación y las revisiones.

Para la segunda fecha del campeonato, la Asociación de Fútbol Argentino ha confirmado a los árbitros que estarán a cargo de los partidos. El viernes 18 de julio, Nicolás Arasa pitará el encuentro entre Boca Juniors y Unión, en el que se espera un duelo intenso en la Zona A. En tanto, Andrés Gariano dirigirá el partido entre Atlético Tucumán y Central Córdoba.

El sábado, en el enfrentamiento entre San Lorenzo y Gimnasia, el árbitro seleccionado será Nicolás Lamolina, quien tendrá que administrar un encuentro con alta expectativa.

También ese día, Hernán Mastrángelo arbitrará el partido entre Platense y Vélez Sarsfield. El domingo, los partidos continuarán con partidos de alta competencia en varias zonas, incluyendo un clásico entre Independiente y Talleres.

En resumen, la Comisión de Arbitraje no ha realizado cambios a pesar de las controversias iniciales y continúa confiando en su plantel. Sin embargo, los errores y decisiones polémicas de la primera fecha sirven como recordatorio de la importancia de perfeccionar los lineamientos y la revisión tecnológica para fortalecer la justicia en el fútbol argentino y evitar que errores como el de Dóvalo se repitan en el futuro.