El defensa Marcos Rojo llega a Racing de Avellaneda en busca de revancha tras su complicado paso por Boca Juniors, firmando un acuerdo por 1.5 millones de euros y con expectativa de aportar liderazgo y experiencia en la búsqueda de la Libertadores.

Luego de algunas semanas de especulación y negociaciones, Marcos Rojo oficializó su regreso al fútbol argentino al firmar un contrato por un año con Racing Club de Avellaneda.

El defensor proveniente de Boca Juniors, donde tuvo un paso turbulento marcado por lesiones y algunas polémicas, llega ahora con la intención de mostrar su mejor versión y aportar liderazgo en un equipo que aspira a conquistar la Copa Libertadores.

La historia de Rojo en Boca fue marcada por altibajos. El argentino de 35 años, que militó en el club durante varias temporadas, jugó un total de 118 partidos y sufrió aproximadamente 141 lesiones durante su estadía, lo que limitó significativamente su presencia en el campo, con una disponibilidad de apenas un 45,5%.

Su salida del club xeneize fue turbulenta, y algunos hinchas y dirigentes cuestionaron la decisión, considerando que las lesiones y las ausencias afectaron su rendimiento.

Tras su paso por Boca, donde conquistó una Copa Libertadores en 2018, Rojo buscaba una nueva oportunidad que le permitiera revalorizarse en el fútbol del continente y demostrar que todavía tiene mucho para aportar.

La opción de Racing surge en un momento en el que el club de Avellaneda se prepara para afrontar la fase de grupos de la Libertadores, además de competir en la liga local.

La llegada de Rojo, con un contrato por un año que se basa en un modelo de pago por rendimiento, fue vista como una jugada inteligente para sumar experiencia y carácter al sector defensivo del equipo.

Desde lo económico, la propuesta del club de Avellaneda le ofrece a Rojo un salario bajo como base, alrededor de 150.000 euros mensuales, con incrementos vinculados a sus apariciones y rendimiento en cancha. La decisión de firmar solo por un año refleja la cautela del jugador, quien aspira a mantenerse en buen estado físico y mostrar continuidad para futuras oportunidades.

Además, el jugador ya realizó la revisión médica y fue inscrito oficialmente en la plantilla que participará en la Libertadores, lo cual marca un paso oficial en su regreso al fútbol argentino.

El técnico de Racing, Gustavo Costas, fue uno de los principales impulsores de la contratación, y las conversaciones fueron cortas pero eficientes.

Costas siempre ha valorado el perfil de Rojo, destacando su liderazgo, experiencia internacional y carácter competitivo, aspectos clave en un torne más exigente.

El entrenador confía en que la presencia del ex Boca será fundamental para elevar el nivel del equipo y contribuir a los objetivos del club.

La incorporación de Rojo también trae cierta expectativa respecto a su rol dentro del vestuario. Aunque en Boca atravesó algunos problemas de disciplina, en Racing el entorno sería más favorable para su integración, y el propio jugador expresó su motivación por aportar en un equipo donde la lucha por la Libertadores es una prioridad.

Para la hinchada académica, la llegada de Rojo genera expectativas por su perfil combativo y liderazgo. La primera aparición oficial será en el partido contra Peñarol en Montevideo, donde se espera que tenga algunos minutos desde el banco, aunque la intención es que esté en condiciones de pelear un puesto en la alineación titular en las próximas fechas.

En definitiva, la historia de Marcos Rojo en Racing representa una oportunidad para redimirse y consolidar un ciclo que, con trabajo y compromiso, podría devolverle la confianza tanto en Argentina como en el fútbol internacional.

Tras un paso con altibajos por Boca, el defensor busca demostrar que aún es un jugador válido y que su talento sigue intacto, con miras a seguir peleando en los torneos más importantes del continente.