La escudería Ferrari enfrenta un panorama incierto de cara a 2026, con rumores sobre la posible salida de Lewis Hamilton y el futuro de Charles Leclerc, en medio de resultados contrarios a los expectativas y la presencia de jóvenes promesas que buscan un puesto en la estructura italiana.
Ferrari atraviesa momentos de gran incertidumbre en medio de la recta final de la temporada 2025. A medida que se acerca el cierre del año, el rendimiento del piloto británico Lewis Hamilton ha levantado sospechas y ha provocado intensos rumores en la escudería italiana.
Según reportes de ESPN F1, múltiples voces dentro del paddock creen que el siete veces campeón del mundo no continuará en Ferrari más allá de 2026, a pesar de tener un contrato vigente hasta ese año.
Fuentes cercanas al equipo señalaron que no se le ofrecerá una renovación automática, dejando abierta la posibilidad de que el piloto busque nuevos horizontes.
Hamilton, que todavía tiene un contrato valuado en aproximadamente 44 millones de euros anuales (unos 48 millones de dólares), no ha mostrado el mismo nivel de competitividad que en temporadas anteriores.
Este año, su peor racha de carrera sin subir al podio en veinte competiciones, solo fue superada por la victoria en el Sprint de China en marzo pasado.
Su desempeño ha quedado muy por detrás de Charles Leclerc, quien ha sido la referencia principal dentro del equipo y que en 2025 no ha podido mostrar el mismo rendimiento de temporadas anteriores.
Dentro de Ferrari, las diferencias entre Hamilton y el entorno del equipo parecen haberse acentuado. Como recoge el medio estadounidense Corriere della Sera, existe una percepción de que “algo no ha funcionado entre Hamilton y Ferrari”, y que la química necesaria para afrontar los retos de la Fórmula 1 ha mermado.
La relación llega a un punto crítico, lo que alimenta las especulaciones sobre la salida del británico una vez finalizado su contrato.
Por otro lado, el futuro de Leclerc también está en duda. El piloto monegasco, en su sexta temporada con Ferrari, está considerando seriamente su continuidad en la escudería. La sequía de victorias que supera los tres años y los altibajos del equipo generan una sensación de cansancio y desilusión en el piloto, quien estaría abierto a buscar un proyecto más estable y competitivo, aunque eso implicara menores ingresos económicos.
Se estima que Leclerc recibiría en promedio unos 10 millones de euros anuales, cifra que podría variar dependiendo del acuerdo final.
Mientras tanto, en el mercado de pilotos destaca el nombre de Oliver Bearman, joven piloto británico de 20 años que actualmente compite en Haas. La impresionante actuación del piloto nacido en Oxford, quien logró un histórico cuarto puesto en el GP de México, ha despertado interés en Maranello.
Como revela la prensa italiana, Ferrari ve en Bearman un perfil promisorio para el futuro, una apuesta que ya ha comenzado a tener en cuenta.
Otra figura que podría tener un destino ligado a Ferrari es George Russell, actual piloto de Mercedes. Aunque su contrato con los alemanes se extiende hasta 2027, con una cláusula de salida que podría activarse en caso de negociaciones, no está descartado que cambie de escudería si las circunstancias lo permiten.
El interés de Ferrari en Russell dependería en gran medida de la posible incorporación de Max Verstappen a Mercedes, una situación que todavía no está confirmada, pero que mantiene en tensión el escenario del mercado de pilotos.
Desde los inicios de su participación en la Fórmula 1 en 2014, Ferrari siempre ha aspirado a contar con los mejores talentos del automovilismo. La escudería italiana, fundada en 1939 en Maranello, ha sido históricamente una de las más exitosas, conquistando 16 campeonatos mundiales de constructores.
Sin embargo, en los últimos años ha tenido que enfrentar una sequía de triunfos que se extiende desde 2008, cuando Kimi Räikkönen logró su última victoria.
El futuro de Ferrari en 2026 depende ahora de diversas variables: la continuidad de Hamilton, las decisiones de Leclerc, y las negociaciones para atraer a nuevas figuras como Bearman o Russell.
El jefe del equipo, Frédéric Vasseur, enfrenta una presión considerable, pese a que el presidente del grupo, John Elkann, ha manifestado públicamente su confianza en él.
La realidad es que los resultados no terminan de acompañar y el desgaste interno se hace cada vez más evidente.
Mientras tanto, en el mercado de pilotos, la escudería italiana mantiene abiertas varias opciones y se prepara para cerrar un 2025 en el que la incertidumbre predomina.
La llegada de nuevos protagonistas, la posible salida de figuras consagradas y la constante lucha por retornar a la cima en la Fórmula 1 marcan el rumbo de una escudería que busca reencontrar su grandeza en un escenario cada vez más competitivo.