El piloto argentino Franco Colapinto sufrió un golpe en las pruebas de neumáticos de Alpine en Hungaroring, pero las primeras informaciones indican que está en buen estado para continuar con sus actividades. El incidente ocurrió en un sector del circuito donde otros pilotos también han tenido accidentes en el pasado. La escudería francesa continúa con sus pruebas en Budapest, centradas en mejorar sus neumáticos para la próxima década.

El piloto argentino Franco Colapinto, de 22 años, fue protagonista de un incidente durante las pruebas de neumáticos que realizaba el equipo Alpine en el circuito de Hungaroring, en Hungría.

Aunque salió del vehículo por sus propios medios tras el choque, tuvo que ser atendido en un centro médico cercano. Sin embargo, en las horas posteriores, fuentes del equipo confirmaron que el piloto se encuentra en buenas condiciones y que no presenta lesiones graves, permitiéndole retomar las pruebas en la misma jornada.

El accidente ocurrió específicamente en la curva 11, una de las más complejas del circuito, durante una tanda de pruebas de neumáticos desarrolladas por Pirelli.

Alpine estaba evaluando los nuevos compuestos que podrían usar a partir de 2026, en un contexto donde el trazado magiar ha sido escenario de varios incidentes históricos.

En el momento del incidente, Colapinto perdió el control de su monoplaza A523, un modelo que data de hace dos años y que, para esta temporada, se encuentra en proceso de actualización.

Afortunadamente, no hubo daños mayores en el vehículo ni en las barreras de protección, ya que el monoplaza no realizó trompos y los impactos fueron menores.

Es importante destacar que la vía de escape en esa curva es de cemento, lo que ayudó a que el automovilista pudiera detenerse de manera relativamente segura sin que el impacto fuera excesivo.

Se calcula que la velocidad del coche en el momento del accidente superaba los 240 km/h.

Este tipo de incidentes no es aislado en la historia del circuito de Hungaroring. La curva 11 ha sido escenario de varios accidentes en años recientes, involucrando a pilotos destacados como Lewis Hamilton en 2016, quien perdió el control de sus neumáticos traseros y chocó contra las barreras, y Sergio Pérez en 2020, quien sufrió un grave accidente que lo dejó con el auto volteado tras una pérdida de suspensión.

En 2021, Mick Schumacher también vivió un incidente similar en su primer año en la Fórmula 1.

Estas incidencias reflejan la naturaleza desafiante del circuito, que ha sido modificado en varias ocasiones para incrementar la seguridad de los pilotos.

Las mejoras, que culminarán en 2026, incluyen la instalación de barreras de neumáticos en lugar de los antiguos muros de concreto, buscando reducir la gravedad de posibles accidentes.

Mientras tanto, las escuadras continúan probando en Budapest, una sede emblemática que, además de ser el escenario del GP de Hungría, se ha convertido en un centro neurálgico para evaluar innovaciones técnicas y de neumáticos en un momento donde la Fórmula 1 busca siempre avanzar en safety y rendimiento.

Con el accidente de Colapinto bajo control y sin lesiones, se reafirma la importancia de las medidas de seguridad en una disciplina en la que la precisión y el valor de los pilotos están en juego en cada vuelta.