La selección femenina de Nueva Zelanda presenta un equipo con caras nuevas y veteranas para su debut en la Copa del Mundo de Cricket de 50 overs, enfrentando desafíos en India y buscando repetir su éxito internacional.

El equipo femenino de Nueva Zelanda ha dado a conocer su lista de jugadoras para participar en la próxima Copa del Mundo de Cricket en formato de 50 overs, que se celebrará por primera vez en India en octubre de 2025.

La selección, que ha pasado por una fase de transición tras su última participación en 2022, incluye un total de seis debutantes en este formato y cuatro que participan en su primer evento internacional oficial con la selección absoluta femenina de Nueva Zelanda.

Supuestamente, la joven Flora Devonshire, de apenas 22 años, fue llamada por primera vez a una lista de ODI (One Day International) tras su destacada actuación en el campeonato doméstico durante el último verano en Nueva Zelanda, un país con una historia sólida en el críquet femenino, habiendo sido pionero en la expansión del deporte en la región en los años 80.

La selección también cuenta con veteranas como Sophie Devine, que jugará su quinta Copa del Mundo y se despide de los ODIs, y Suzie Bates, también en su quinto torneo mundial.

Presuntamente, Lea Tahuhu, una de las lanzadoras más experimentadas del equipo, participa en su cuarta Copa del Mundo, mientras que Maddy Green y Melie Kerr afrontan su tercer torneo internacional.

El entrenador Ben Sawyer expresó su satisfacción con la composición del equipo. “Felicito a las 15 jugadoras que han sido seleccionadas para representar a Nueva Zelanda en este evento. Quiero destacar especialmente a las cuatro debutantes, que se han ganado esta oportunidad con su esfuerzo y dedicación. Estoy muy contento con el equilibrio del grupo y confiado en que podremos adaptarnos a las condiciones de India y enfrentarnos a los rivales con la mejor preparación posible”, afirmó.

El proceso de selección no fue sencillo, ya que varias jugadoras de experiencia, como Fran Jonas, Lauren Down, Molly Penfold y Hannah Rowe, no lograron formar parte del equipo.

“Decidir dejar fuera a jugadores de tanta calidad como Fran fue difícil, pero creemos que con 21 años todavía tiene mucho por ofrecer y que su mejor momento aún está por venir”, agregó Sawyer.

El primer duelo de Nueva Zelanda en el torneo será contra Australia, en Indore, el 1 de octubre. La selección ha trabajado intensamente en los meses previos, especialmente en aspectos físicos y técnicos, para estar en su mejor forma. “Nunca habíamos llegado tan preparados a un Mundial. El hecho de no tener partidos internacionales desde abril nos ha permitido concentrarnos en mejorar nuestros aspectos físicos y técnicos, lo cual puede marcar la diferencia en un país como India”, señaló el entrenador.

Históricamente, Nueva Zelanda ha sido una de las potencias en el críquet femenino, habiendo logrado el título en el Mundial de T20 el año pasado y obteniendo varios podios en competiciones internacionales.

La experiencia de sus jugadoras veteranas, combinada con las nuevas promesas, hace que el equipo sea uno de los favoritos para sorprender en esta edición.

La Copa del Mundo de 2025 será una oportunidad única para las jugadoras debutantes, que podrán medirse con las mejores del mundo en un escenario de alta presión y gran exposición.

La presencia de jugadoras como Sophie Devine y Suzie Bates, que han sido pilares del equipo durante más de una década, aportará liderazgo y experiencia a un grupo en plena renovación.

La expectativa es alta y todos los ojos estarán puestos en cómo se desempeñan estas nuevas caras en el escenario mundial, en una competencia que promete ser histórica para el críquet femenino en Oceanía y más allá.