En un acontecimiento que pasará a la historia del cricket internacional, el capitán de Inglaterra, Ben Stokes, se convirtió en el primer jugador en la historia del cricket en lograr sumar más de 300 carreras y tomar más de 15 wickets en una misma serie de pruebas.

Este logro, presuntamente inédito, fue alcanzado durante el cuarto partido de la serie contra India, disputado en el estadio Old Trafford de Manchester.

Stokes, conocido por su versatilidad y potencia en el campo, alcanzó una de sus mejores actuaciones en años recientes. Con un brillante innings de 141 carreras en 198 bolas, su primer century en dos años, y una actuación de seis wickets, incluyendo un cinco-wicket en la primera entrada, el jugador inglés dejó una huella imborrable en la historia del deporte.

La serie, que ha sido muy reñida, ahora se sitúa con un marcador de 1-2 a favor del equipo inglés.

Supuestamente, solo un jugador en los últimos 40 años había logrado un doble logro similar: Andrew Flintoff en la serie de Ashes en 2005, en la que acumuló 402 carreras y tomó 24 wickets.

La hazaña de Stokes, con 304 carreras en siete innings en la serie, promedia un notable 43.42, además de su impresionante rendimiento con la pelota, donde ha obtenido 17 wickets con una media de 25.23 y figures máximas de 5/72.

Este doble récord ha puesto a Stokes en un nivel similar al de leyendas como Ian Botham, con quien comparte el segundo puesto en la lista de más premios como Hombre del Partido, con 12 reconocimientos.

Solo Joe Root, exbater y actual capitán, tiene más galardones en esa categoría para Inglaterra.

El partido fue una muestra de la determinación del equipo inglés. En el primer innings, India logró una sólida puntuación de 358 carreras, con destacadas actuaciones de Yashasvi Jaiswal, Sai Sudharsan y Rishabh Pant.

Sin embargo, la actuación de Stokes con 5 wickets y Jofra Archer con 3, fueron determinantes para frenar a la ofensiva india.

En la segunda entrada, Inglaterra consolidó su dominio con aportaciones clave de Zak Crawley y Ben Duckett, quienes anotaron 84 y 94 carreras respectivamente, formando una apertura de 166 carreras.

Joe Root y Ben Stokes continuaron con su rendimiento excepcional, anotando 150 y 141 carreras, llevando a Inglaterra a una ventaja de 311 carreras en total.

India, por su parte, trató de responder con esfuerzos de KL Rahul y Shubman Gill, quienes batieron durante largas sesiones, logrando una resistencia notable.

La presencia de Jadeja y Sundar, con más de 100 carreras en la misma serie, ayudó a India a reducir la diferencia, alcanzando un empate en 425/4 en una maniobra de resistencia que, presuntamente, evitó una derrota segura.

El próximo y último partido de la serie se disputará en The Oval a partir del 31 de julio. La serie continúa siendo muy disputada, con Inglaterra buscando asegurar la victoria en casa, mientras India intenta igualar o superar el marcador.

Supuestamente, estos eventos marcarán un antes y un después en la historia del cricket, consolidando a Ben Stokes como uno de los all-rounders más completos y destacados del deporte.

La serie ha sido un claro ejemplo de la intensidad y la pasión que el cricket puede ofrecer, con actuaciones memorables que quedarán en la memoria de los aficionados por años.

La expectativa ahora está en qué otros récords o momentos épicos podrán surgir en los próximos encuentros.