En un emocionante encuentro celebrado el 21 de marzo, Panamá logró una victoria sorprendente al derrotar a Estados Unidos 1-0, lo que les permite avanzar a la final de la Liga de Naciones de la CONCACAF.

El héroe de la noche fue Cecilio Waterman, quien anotó un impresionante gol en el cuarto minuto del tiempo de descuento de la segunda mitad. Waterman, quien juega en Chile, recibió un pase de Adalberto Carrasquilla y, con un disparo perfectamente ejecutado con su pie derecho, envió el balón al fondo de la red, dejando sin opciones al portero Matt Turner.

Este fue el undécimo gol internacional de Waterman, y lo logró en la única oportunidad clara que tuvo su equipo durante todo el partido.

Este triunfo representa un hito en la historia del fútbol panameño, ya que es la tercera vez consecutiva que logran vencer a Estados Unidos en competiciones oficiales, habiéndoles ganado en las semifinales de la Copa de Oro de 2023 y en la fase de grupos de la Copa América del año pasado.

Waterman, visiblemente emocionado tras el gol, expresó: "Muchas cosas buenas me han pasado en mi carrera, pero esta es diferente. Esta es increíble". Su celebración fue memorable; saltó las vallas publicitarias y se unió a Thierry Henry en el escenario de transmisión, quien también parecía asombrado por la hazaña de Waterman.

La victoria de Panamá se suma a su creciente legado en el fútbol internacional. Bajo la dirección del entrenador Thomas Christiansen, el equipo ha superado las expectativas en numerosas ocasiones, destacando su victoria en noviembre pasado contra Costa Rica en los cuartos de final de la Liga de Naciones.

"Esta es la tercera vez que estamos en esta posición. Esta vez, queremos dar ese regalo a Panamá. Queremos lograr algo para ellos, para Centroamérica", declaró Waterman, con la esperanza de que su equipo logre un nuevo hito en la final.

Por otro lado, la derrota fue un duro golpe para el entrenador estadounidense Mauricio Pochettino, quien asumió el cargo hace seis meses tras la salida de Gregg Berhalter.

Pochettino se mostró decepcionado por el desempeño de su equipo, señalando que no mostraron la agresividad necesaria tanto en ataque como en defensa.

A pesar de las oportunidades, incluyendo un disparo de Tyler Adams que se fue desviado en el tiempo de descuento, el equipo estadounidense no logró concretar sus intentos.

Este resultado marca un cambio significativo en la Liga de Naciones, ya que por primera vez el trofeo no se quedará en Estados Unidos, que había ganado las tres ediciones anteriores desde que se inauguró el torneo en 2019.

Con este triunfo, Panamá no solo ha demostrado su capacidad para competir al más alto nivel, sino que también ha dejado claro que el fútbol en Centroamérica está en auge.

La final se celebrará el próximo domingo, donde Panamá se medirá ante México o Canadá, en un duelo donde buscarán escribir otro capítulo glorioso en su historia futbolística.

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