El equipo de Boca Juniors partió hacia Miami para participar en el Mundial de Clubes, con una plantilla que incluye a varios jugadores y algunas novedades en la lista de viajeros, mientras enfrenta detalles contractuales y negociaciones por refuerzos.
La delegación de Boca Juniors partió en la noche de ayer hacia Estados Unidos para participar en el Mundial de Clubes, un torneo que representa una oportunidad histórica para el club argentino.
La salida se realizó desde el aeropuerto Internacional de Ezeiza, con un vuelo programado para las 22:30 horas, y en el aeropuerto se dieron a conocer los detalles del viaje y la formación de la plantilla.
El plantel, que ya se encontraba en la sala de embarque, contó con 29 jugadores en la lista de viajeros oficiales, incluyendo a figuras reconocidas como Edinson Cavani, Carlos Palacios, y Exequiel Zeballos.
Sin embargo, no todos los futbolistas pudieron acompañar al equipo en esta ocasión; cuatro jugadores quedaron en tierra por diversas razones. Cristian Lema y Esteban Rolón no fueron considerados por el entrenador Miguel Russo, mientras que Mateo Mendía no pudo viajar por lesión, ya que se encuentra desgarrado.
Además, Ayrton Costa no pudo obtener la visa americana debido a antecedentes penales, lo que limitó su participación.
En cuanto a las novedades en la plantilla, uno de los temas más destacados fue la llegada de Marco Pellegrino, defensor central de 22 años que arribó tras un acuerdo por aproximadamente 3,6 millones de euros (equivalente a 4 millones de dólares según la cotización original).
El jugador, procedente de Milan, aún no pudo unirse oficialmente a la delegación, ya que pendiente de la firma de su contrato y la resolución de papeles administrativos.
Si todo se normaliza, Pellegrino se sumará a la equipo en Miami en los próximos días y estará disponible para debutar en el torneo.
Por otro lado, Boca está a la expectativa de cerrar la transferencia de Malcom Braida con San Lorenzo, por un monto cercano a los 2,2 millones de euros (equivalentes a 2,5 millones de dólares), con la promesa de que no ejecutará la cláusula de rescisión de 1,2 millones de dólares.
La negociación continúa, y Riquelme y su cuerpo técnico están atentos a cerrar el fichaje para fortalecer aún más el plantel.
El debut de Boca en el Mundial de Clubes será el próximo lunes 16 en Miami, frente al Benfica de Portugal, con Angel Di María y Nicolás Otamendi en su plantilla.
La competencia representa una oportunidad única para visibilizar el fútbol argentino en un escenario internacional de alto nivel, enfrentándose a rivales de la élite europea.
El viaje de Boca en estos días también evidencia las complicaciones logísticas y administrativas que atraviesan los clubes en medio de un contexto internacional donde las restricciones y requisitos migratorios siguen siendo un desafío.
La institución azul y oro continuará trabajando en aspectos administrativos mientras prepara su juego en un torneo que se disputará en un escenario diferente al habitual, en un país donde la pasión por el fútbol trasciende fronteras y unifica a millones de aficionados.
Con la mira puesta en el objetivo de hacer un papel digno en el torneo global, Boca confía en la experiencia de sus referentes y en las promesas de éxito que pudo haber sembrado a lo largo de su historia en competencias internacionales, como la conmemoración de su primera participación en un Mundial de Clubes en 2000, cuando conquistaron el trofeo intercontinental.
Mientras tanto, la hinchada espera con ilusión el rendimiento del equipo en un escenario mundial y sueña con un campeonato que quedará en la historia del club argentino.