A solo 0,4 segundos de que terminara el tiempo reglamentario, en un partido vibrante y lleno de tensión, Emiliano Lezcano convirtió un lanzamiento heroico que le dio la victoria a Ferro sobre Boca Juniors en un duelo de cuartos de final de la Liga Nacional de Básquet en Argentina.

Los hechos ocurrieron en el gimnasio Héctor Etchart, donde ambos equipos disputaban un encuentro que mantuvo en vilo a los espectadores hasta el último segundo.

La serie, hasta ese momento, estaba igualada con una victoria para cada equipo, lo que hacía que este partido fuera decisivo para definir quién avanzaría a las semifinales.

Cuando restaba apenas un segundo para el final, el marcador señalaba un empate en 73 puntos, generando expectativa sobre quién sería el vencedor.

El desarrollo final del encuentro estuvo marcado por una acción que quedará en la memoria de los fanáticos del baloncesto. Facundo Piñero, jugador de Boca, tomó la pelota en una posición incómoda y, con la intención de relocalizar el balón, intentó un pase largo hacia sus compañeros.

Sin embargo, Emiliano Lezcano, jugador de Ferro, interceptó el pase con una precisión admirable y, en un instante, tomó una decisión que cambiaría el destino del partido.

Desde una posición casi debajo del aro propio, Lezcano se perfiló hacia su derecha y, en una maniobra rápida, lanzó el balón en dirección al aro rival.

La pelota voló como un misil, atravesando la noche de Caballito y entrando en el aro en una ejecución perfecta, justo en el momento en que las luces del reloj indicaban que solo quedaban 0,4 segundos para que sonara la chicharra.

Este tiro no solo quedó grabado como uno de los momentos más emocionantes en la historia reciente de la Liga Argentina de Básquet, sino que también fue determinado como el ganador del partido.

Según la página oficial de la competencia, la acción fue catalogada como