El atleta sueco Armand 'Mondo' Duplantis conquista su tercer título mundial y rompe su propio récord en el salto con garrocha, consolidándose como una de las mayores leyendas del atletismo contemporáneo.
El mundo del atletismo vive una nueva era marcada por sorpresas y récords históricos durante el Mundial de Tokio. Entre los hechos más destacados, la actuación de Armand "Mondo" Duplantis, la estrella sueca del salto con garrocha, que continúa dejando huella con sus hazañas.
El salto con garrocha, disciplina en la que Duplantis ha dominado con autoridad en los últimos años, volvió a ser escenario de un espectáculo memorable.
El atleta, nacido hace 25 años en Estados Unidos pero con ascendencia sueca, superó la barrera de los 6,30 metros en Tokio, logrando su 14º récord mundial en la disciplina, un logro que lo sitúa en el pináculo del deporte.
La marca que estableció fue de 6,31 metros, equivalente a aproximadamente 20 pies y 8 pulgadas, una cifra que en euros se traduce en unos 55,000 euros, considerando sus derechos de patrocinio y premios, y que representa una plusmarca en su carrera.
Duplantis, que ya había conquistado el oro olímpico en Tokio en 2021 con una marca de 6,02 metros, y posteriormente en París en 2024 con un récord mundial de 6,25 metros, reafirmó su dominio en la disciplina.
Además, en esta competencia sumó su tercer título mundial consecutivo, uniéndose a una élite exclusiva que incluye a leyendas como Sergey Bubka. "Me siento increíblemente feliz. Sabía que la oportunidad de batir nuevamente el récord estaba cerca y di todo para lograrlo. Cada salto es resultado de años de esfuerzo y pasión", declaró emocionado tras la competencia.
Su rivalidad con deportistas de élite como Renaud Lavillenie, Kurtis Marschall y Sam Kendricks, quienes también alcanzaron marcas sobresalientes en el evento, motiva aún más a Duplantis a seguir batiendo sus propios límites.
La velocidad en su carrera, la técnica impecable y su fuerza física lo convierten en un fenómeno que trasciende fronteras y generaciones. En Tokio, su velocidad de salida alcanzó aproximadamente 37.82 km/h, y su técnica le permitió dominar el salto en condiciones extremas.
El deporte del salto con garrocha, que en su etapa de esplendor contó con leyendas como Sergey Bubka, quien sumó 35 récords mundiales y fue considerado inmortal en su época, ha visto en Duplantis a un sucesor de sus logros.
Bubka, que en los años 80 y 90 revolucionó la disciplina, estableció récords que ahora parecen lejanos, pero que sirvieron como inspiración para los nuevos talentos.
El sueco ha expresado en varias entrevistas que no se preocupa demasiado por el futuro, sino que disfruta cada momento. "Solo quiero seguir disfrutando de esto, seguir mejorando y haciendo historia en el atletismo", afirmó. La capacidad de analizar en segundos si un salto será válido y la rapidez en la transición del suelo al aire son parte de su fórmula para el éxito.
Este récord en Tokio se une a su impresionante colección de logros, entre ellos los mundiales en Eugene (2022), Budapest (2023) y su oro olímpico en Tokio.
La historia del salto con garrocha, que en los tiempos de Bubka se caracterizaba por su técnica, fuerza y resistencia a los récords, ahora continúa siendo escrita por Duplantis, quien con cada salto desafía las leyes de la física y del deporte.
El legado de Bubka, que en su apogeo fue símbolo de innovación y perseverancia, encuentra en Duplantis a un heredero que, con apenas 25 años, ya ha marcado su nombre en los registros mundiales y en la historia del atletismo.
Solo el tiempo dirá cuánto más podrá superar el sueco, pero su roce con la historia ya está asegurado.