Jorgelina Cardoso ha sido una figura fundamental en la vida de Angel Di María, acompañándolo desde hace más de 14 años y siendo madre de sus dos hijas, Mía y Pía.

Su presencia constante en los momentos importantes del futbolista ha demostrado que el apoyo familiar es esencial para afrontar los desafíos en la carrera de un deportista de élite.

Desde sus inicios, Di María siempre ha contado con el respaldo de su esposa, quien ha estado a su lado en las buenas y en las malas. La historia de esta pareja comienza en Rosario, donde ambos crecieron y forjaron la base de su vínculo. Jorgelina, además de ser su esposa, es una gran influencia en su vida personal y emocional, manteniéndose como un pilar durante toda su trayectoria deportiva.

Durante el paso de Di María por clubes como Benfica y posteriormente en su regreso a Rosario Central, la relación con su familia ha sido clave. La esposa del futbolista no solo lo acompaña en los partidos, sino que también se ha convertido en una figura que ayuda a mantener los valores y la estabilidad en el entorno familiar del jugador.

La presencia de Jorgelina en partidos internacionales y en eventos importantes refleja su compromiso y apoyo continuo.

El vínculo de Di María con su esposa ha sido también tema de interés mediático. La pareja ha enfrentado diferentes situaciones públicas, incluyendo las reacciones de los hinchas en algunos estadios, como en el caso del rechazo de algunos hinchas de Boca a Di María durante un partido en Potosí, que formó parte de los últimos enfrentamientos en su etapa en Benfica.

La reacción de Jorgelina fue de comprensión, aunque dejó claro que no tolera los insultos o faltas de respeto.

Además de su papel en lo emocional, Jorgelina ha expresado en varias entrevistas el orgullo que siente por la carrera de su esposo y su deseo de que su retorno a Rosario Central sea una experiencia positiva, viviendo ese momento junto a sus hijas.

La expectativa en la ciudad natal de Di María crece día a día, y la familia espera con ansias la primera visita de las jóvenes al estadio Gigante de Arroyito.

Por otro lado, el apoyo de la familia no solo se limita a los aspectos emocionales. La historia de Di María en el fútbol internacional también demuestra cómo un respaldo sólido puede influir en la toma de decisiones y en la estabilidad del jugador.

La trayectoria de Ángel en clubes europeos, incluido su paso en diferentes equipos, ha estado acompañada de un ambiente familiar que le permite concentrarse en su rendimiento.

En el contexto del Mundial de Clubes, Di María continúa siendo una figura destacada y muestra cómo la confianza y el amor familiar son fundamentales para afrontar las presiones y las expectativas.

La historia de esta pareja ejemplifica cómo el apoyo de un núcleo cercano puede marcar la diferencia en la vida y carrera de un futbolista, inspirando a muchos seguidores que creen en la fortaleza de los lazos familiares.

En definitiva, la relación entre Angel Di María y Jorgelina Cardoso no solo es un ejemplo de amor duradero, sino también una muestra de la importancia de tener a alguien que acompañe los triunfos y las adversidades, fortaleciendo así la carrera y la vida personal del deportista argentino.