El joven talento argentino Faustino Oro vio frustrada su participación en la Copa del Mundo de Ajedrez en Goa tras caer en el desempate ante vidit Santosh Gujrathi, en un torneo donde dejó huella como el jugador más joven en disputar este nivel. La actuación del niño de 12 años fue destacada a nivel internacional, y su potencial sigue siendo confirmado por expertos y rivales por igual.
La participación de Faustino Oro en la Copa del Mundo de Ajedrez en Goa llegó a su fin tras una destacada y emotiva actuación en el torneo internacional celebrado en India.
Con solo 12 años, Oro logró marcar un hito en la historia del deporte, convirtiéndose en el jugador más joven en competir en este nivel del certamen.
El joven prodigio argentino inició su camino con dos victorias en las rondas iniciales, donde derrotó al gran maestro croata Ante Brkic, de 37 años y con un índice de puntuación ELO de aproximadamente 2.439 puntos. Su desempeño en estos primeros pasos fue tan brillante que muchos lo compararon con las estrellas más consagradas del ajedrez, incluso ganándose la atención de grandes referentes mundiales.
En segunda ronda, Oro enfrentó al formidable jugador indio Vidit Santosh Gujrathi, actualmente ubicado en el puesto 27 del ranking mundial con un ELO de aproximadamente 2.375 puntos. Tras empatar en las dos primeras partidas clásicas, fue necesario recurrir a los desempates rápidos, en los que el niño argentino mostró todo su talento.
La primera partida rápida, jugada con las piezas negras, terminó en un empate tras 41 movimientos en una triple repetición. Sin embargo, en la segunda, que fue decisiva, el esfuerzo de Faustino no alcanzó y sufrió una derrota en una partida apretada que se decidió en los últimos momentos con solo un minuto en el reloj.
El resultado fue una decepción momentánea, pero el impacto dejado por Oro en el mundo del ajedrez fue inmenso. La comunidad internacional destacó su madurez y habilidades, y su misma actuación fue vista como un paso importante para el crecimiento del ajedrez juvenil en América y en todo el mundo.
El gran maestro indio Vidit, con quien enfrentó en el desempate, elogió públicamente a Oro. "Es un prodigio y uno de los mayores talentos que ha surgido en el continente americano. Tiene un futuro brillante por delante", afirmó.
A lo largo del torneo, Faustino mostró una madurez sorprendente para su edad, enfrentándose a rivales con mayor experiencia y puntuaciones Elo superiores, y dejando siempre una impresión positiva en los jueces, en los expertos y en los espectadores.
Su avance en el torneo es comparable a otros hitos históricos en el ajedrez infantil; en 2019, por ejemplo, la leyenda Magnus Carlsen alcanzó el título de gran maestro con 13 años, estableciendo un precedente en la historia moderna del deporte.
En su camino hacia la clasificación, Oro ya había logrado su primera norma de gran maestro en septiembre pasado, cuando con solo 11 años, 11 meses y 9 días, se convirtió en el segundo niño más joven en lograrlo, tras Gukesh D.
de India. Para obtener el título máximo del ajedrez, necesita sumar dos normas más, y si logra hacerlo antes del 7 de marzo del próximo año, será el jugador más joven en la historia en alcanzar esa categoría.
Actualmente, reside en España junto a su familia, quien ha estado respaldando su crecimiento en el deporte desde que se mudaron a Europa en 2023.
Queda claro que Faustino Oro tiene todas las condiciones para convertirse en una figura destacada en el ajedrez mundial. La experiencia en Goa, además del reconocimiento internacional, le brinda mayor motivación para seguir aprendiendo y perfeccionándose en el tablero.
Su historia no solo inspira a jóvenes talentos en América, sino que también reafirma la importancia del trabajo dedicado y la pasión por el deporte mental.
De cara al futuro, todo indica que estaremos escuchando mucho más de Faustino Oro, quien, con su talento y constancia, apunta a dejar una huella duradera en la historia del ajedrez global.
La comunidad sigue con atención sus próximos pasos, esperando que pueda consolidar su lugar entre los grandes del juego y seguir haciendo soñar a generaciones con su talento excepcional.