La comunidad destaca en la feria de vino español con una representación significativa, buscando expandir sus exportaciones que alcanzan los 227 millones de euros anuales.

La Barcelona Wine Week se ha convertido en un evento crucial para el sector vitivinícola de Castilla y León, que busca abrir nuevas puertas en mercados internacionales.

La consejera de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, María González Corral, ha resaltado la importancia de la Comunidad en este salón, donde se presentan 233 bodegas, lo que representa un 68 % más que el año anterior.

Esto significa que casi uno de cada cinco vinos presentes en la feria proviene de esta región, lo que subraya su potencial en el ámbito vitivinícola mundial.

El sector vitivinícola de Castilla y León es un pilar fundamental de la economía regional, con una facturación anual que supera los 1.000 millones de euros, equivalente al 3,1 % del PIB de la comunidad.

Además, este sector sostiene alrededor del 3,8 % del empleo regional, lo que se traduce en aproximadamente 33.000 puestos de trabajo, muchos de los cuales se encuentran en áreas rurales donde la viticultura tiene profundas raíces.

En el último año, las exportaciones de vino de Castilla y León alcanzaron los 227,3 millones de euros, marcando un crecimiento del 29 % en los últimos cinco años.

Este crecimiento es notable, especialmente en un contexto donde el mercado nacional e internacional enfrenta desafíos.

La consejera ha indicado que, a pesar de la ralentización en el mercado, los vinos de Castilla y León han superado el rendimiento de sus competidores nacionales, lo que refleja la calidad y el reconocimiento de sus productos.

Uno de los objetivos principales de la participación de Castilla y León en la Barcelona Wine Week es consolidar y expandir las ventas internacionales.

Hasta noviembre de 2024, las exportaciones estaban valoradas en 213 millones de euros, lo que representa un ligero aumento en comparación con el mismo periodo del año anterior.

La Junta de Castilla y León ha apoyado la presencia de 61 bodegas en este evento, además de cinco figuras de calidad, que acuden bajo la marca institucional Tierra de Sabor, la cual es sinónimo de calidad alimentaria en la región.

La Barcelona Wine Week no solo es un punto de encuentro para productores y compradores, sino que también ofrece un amplio programa de catas y ponencias, destacando la riqueza y diversidad de los vinos de la comunidad.

Este año, entre las actividades más destacadas está la jornada de Arlanza Field Blended, que pone el foco en la vinificación de microparcelas con más de cinco variedades de uva, una práctica tradicional en el valle del Arlanza.

Además, se llevará a cabo la XX edición de los premios Zarcillo International Wine Awards, que se celebrarán en mayo en Ávila, un evento que promueve la calidad de los vinos de la región y que es muy apreciado en el sector.

Las bodegas de Castilla y León valoran enormemente su participación en la Barcelona Wine Week, no solo por las oportunidades de negocio que ofrece, sino también por la visibilidad que les brinda la marca Tierra de Sabor, que ha demostrado ser un vehículo eficaz para acceder a nuevos mercados.

Con una rica tradición vitivinícola, Castilla y León sigue consolidándose como un referente en el panorama vitivinícola nacional e internacional.