El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, ha subrayado el compromiso del gobierno autonómico con el sector vitivinícola, uno de los pilares económicos y culturales de la región.

Durante su intervención en la XX edición de los Premios Zarcillo, celebrados en Segovia, Mañueco anunció que las ayudas destinadas a inversiones en bodegas se han duplicado, alcanzando un total de 29 millones de euros, equivalentes a aproximadamente 31 millones de dólares o 27 millones de libras esterlinas.

Este incremento refleja la apuesta decidida del Ejecutivo autonómico para modernizar, digitalizar y mejorar las instalaciones de las bodegas, apoyando a más de 750 empresas en toda la comunidad.

Históricamente, Castilla y León ha sido una de las regiones vinícolas más prestigiosas de España y del mundo, con una tradición que data de la época romana y que ha contribuido a la consolidación de su identidad cultural.

La región cuenta con unas 84.000 hectáreas de viñedo y más de 16 denominaciones de origen, además de la IGP Vinos de Castilla y León, que representan casi un tercio del valor económico del vino de calidad en el país.

El sector genera empleo para aproximadamente 33.000 personas, tanto en tareas directas como indirectas, y favorece el asentamiento poblacional en zonas rurales, donde el enoturismo y las actividades relacionadas con el vino han cobrado un papel fundamental en la economía local.

La exportación de vinos de la región ha experimentado un crecimiento superior al 38% desde 2020, alcanzando cifras que superan los mil millones de euros, unos 1.070 millones en moneda europea.

Para potenciar aún más la presencia internacional del vino de Castilla y León, el gobierno autonómico ha anunciado una nueva convocatoria de ayudas que sumará 9,2 millones de euros (unos 9,8 millones de dólares o 8,6 millones de libras).

Estas ayudas están destinadas a promover la participación en ferias internacionales, desarrollar campañas de marketing y establecer redes comerciales en mercados clave, con el objetivo de reforzar la posición de las bodegas en mercados exteriores y afrontar las políticas arancelarias que afectan a las exportaciones.

Además, los Premios Zarcillo continúan siendo un referente para reconocer la excelencia en la elaboración de vinos. Este año, de los 1.300 vinos presentados, se galardonó a 45 con premios de gran oro, 175 con oro y 168 con plata. El 55% de los galardones proceden de Castilla y León. Entre los reconocimientos especiales, destacan premios para bodegas como Pandora y Pago Heredad de Urueña, y menciones a la innovación en vinos ecológicos.

El acto también sirvió para homenajear a personalidades y entidades que han contribuido al crecimiento y prestigio del sector, como la cooperativa Cuatro Rayas y el periodista Javier Pérez de Andrés.

La gala, que se desarrolló en ciudades Patrimonio de la Humanidad como Ávila y Segovia, sirvió como un escaparate internacional de la riqueza cultural y enológica de Castilla y León, consolidando su posición como una de las regiones vitivinícolas más importantes de Europa.