La comunidad autónoma de Castilla y León se prepara para celebrar una de sus citas culturales más emblemáticas, Las Edades del Hombre, en una edición que lleva por lema 'Esperanza'.

Este evento, que regresa a la histórica ciudad de Zamora después de 25 años, se desarrollará desde octubre de 2025 hasta abril de 2026 y coincidirá con el Año Jubilar 2025, una celebración religiosa de gran significado en la región.

La vicepresidenta del Gobierno autonómico, Isabel Blanco, anunció que la iniciativa contará con una inversión superior a un millón de euros, en proceso de tramitación, destinada a la organización, promoción y restauración de patrimonio.

Esta inversión es parte de un plan estratégico para potenciar tanto el impacto cultural como el turístico del evento, reforzando a Castilla y León como uno de los destinos más importantes del turismo religioso y cultural a nivel internacional.

Las sedes principales de la muestra serán la majestuosa Catedral de Zamora y la iglesia de San Cipriano, donde se exhibirán obras de gran valor artístico y patrimonial.

Además, la iglesia de San Isidoro funcionará como centro de divulgación, extendiendo así el alcance de la exposición a diferentes espacios de la ciudad.

La temática de esta edición girará en torno a la Cruz y la Resurrección de Jesús, ofreciendo un recorrido artístico y espiritual que invita a la reflexión sobre la esperanza y la renovación.

La presentación oficial del cartel y la temática tuvo lugar en la iglesia de San Cipriano, con la participación de diversos representantes institucionales, entre ellos el obispo de Zamora, Fernando Valera, y el presidente de la Diputación, Javier Faúndez.

Este evento no solo es una celebración cultural, sino también un motor económico y social para la ciudad y la región. La colaboración de la Junta de Castilla y León con la Fundación Las Edades del Hombre, que nació hace 37 años, ha sido fundamental para consolidar este proyecto como un referente en el ámbito del patrimonio y del arte sacro.

La fundación ha organizado cerca de 40 exposiciones en diferentes templos, exhibiendo más de 5.300 obras y recibiendo la visita de más de doce millones de personas a lo largo de su historia.

El apoyo financiero de la Junta se complementa con una subvención de más de 100.000 euros del Servicio Público de Empleo de Castilla y León, gestionada a través de la Consejería de Industria, Comercio y Empleo, con el objetivo de fomentar la creación de empleo en la región.

Esta ayuda permitirá contratar personal para obras y servicios relacionados con la exposición, promoviendo además acciones que valoricen el patrimonio histórico y cultural local.

Zamora, conocida como la capital del románico, será el escenario idóneo para esta celebración. La ciudad cuenta con un patrimonio arquitectónico y cultural de gran relevancia, resultado de siglos de historia, donde se combina la religiosidad con las tradiciones festivas.

La elección de Zamora para albergar Las Edades del Hombre no es casual, ya que en 2000 la ciudad acogió la edición titulada 'RemembranZa', que conmemoró el XI centenario de la fundación de su diócesis.

La imagen del cartel de esta edición refleja esa tradición, simbolizando el paso de la muerte a la vida y transmitiendo un mensaje de esperanza.

Durante más de tres décadas, Las Edades del Hombre ha sido mucho más que una exhibición de arte sacro. Se ha convertido en un proyecto de desarrollo integral que combina conservación, investigación y difusión del patrimonio. Ha contribuido a dinamizar la economía local, generando empleo y favoreciendo el turismo, la gastronomía y las actividades culturales en los municipios anfitriones.

La iniciativa también ha sido un ejemplo de colaboración entre diferentes instituciones públicas y privadas, incluyendo a la Diputación de Zamora, CaixaBank, la Diócesis local, Renfe y la ONCE.

En definitiva, esta edición de Las Edades del Hombre en Zamora no solo será una oportunidad para admirar obras de gran valor artístico y espiritual, sino también un impulso para la economía y la promoción internacional de Castilla y León.

La combinación de patrimonio, fe y esperanza busca dejar una huella duradera en la memoria de los visitantes y en la historia cultural de la región.