La Ciudad Autónoma de Buenos Aires ha dado un paso importante en su estrategia de seguridad urbana al sumar 1.200 nuevas cámaras de videovigilancia distribuidas en 300 puntos clave de diversos barrios. Con esta incorporación, la capital argentina supera las 15.000 cámaras en funcionamiento, consolidándose como la ciudad con mayor cobertura de videovigilancia en toda la región.

Estos nuevos dispositivos están instalados en grupos de cuatro en lugares estratégicos de la ciudad, en barrios como La Boca, Barracas, Parque Patricios y Nueva Pompeya (Comuna 4); Flores y Parque Chacabuco (Comuna 7); Villa Soldati, Villa Riachuelo y Villa Lugano (Comuna 8); Villa General Mitre, Villa Devoto, Villa del Parque y Villa Santa Rita (Comuna 11), además de Palermo (Comuna 14).

Presuntamente, cada comuna cuenta con más de 100 cámaras, lo que permite ampliar significativamente la cobertura y la capacidad de respuesta ante incidentes.

El Jefe de Gobierno, Jorge Macri, afirmó que con estas nuevas cámaras se incrementó la cobertura de videovigilancia del 75% al 82%, posicionando a Buenos Aires como la ciudad con mayor cantidad de cámaras en toda la región.

Macri explicó que la elección de los sitios para la instalación de estos dispositivos se realizó mediante un proceso participativo, en el que se tuvo en cuenta la opinión de los vecinos y las estadísticas delictivas, además del análisis técnico del mapa del delito, que supuestamente revela zonas con mayor incidencia delictiva.

Las cámaras están conectadas a los Centros de Monitoreo Urbano (CMU) ubicados en Chacarita, Lugano, 9 de Julio y Puerto Madero. Desde estos centros, se reciben alertas y se coordina la actuación policial para prevenir delitos y responder rápidamente ante cualquier incidente. Desde el inicio del programa, se han instalado más de 15.000 cámaras en toda la ciudad, lo que representa un esfuerzo sostenido por modernizar y fortalecer el sistema de seguridad.

El ministro de Seguridad, Horacio Giménez, supuestamente destacó que la inversión en tecnología, infraestructura y capacitación en videovigilancia es clave para construir una Buenos Aires más segura.

Según sus palabras, cada nueva cámara representa un paso más en esa dirección, facilitando tanto labores preventivas como investigaciones forenses.

Este sistema de videovigilancia forma parte del Sistema Integral de Seguridad de la ciudad, que también incluye más de 26.000 policías en las calles, patrullajes en motos, bicicletas, vehículos blindados y la implementación de puntos seguros en plazas, parques y estaciones de transporte.

Además, la ciudad cuenta con el Anillo Digital, que dispone de 814 pórticos lectores de patentes en los accesos principales, y una red de autopistas que identifica a más de 3 millones de vehículos diarios, logrando reducir en un 40% los delitos relacionados con automotores.

En definitiva, la incorporación de estas nuevas cámaras refuerza la estrategia de seguridad ciudadana en Buenos Aires, buscando no solo prevenir delitos, sino también ofrecer mayor tranquilidad a sus habitantes.

Supuestamente, estas inversiones en tecnología y recursos humanos permitirán que la ciudad continúe siendo uno de los lugares más seguros de la región, consolidando su posición como una metrópoli moderna y comprometida con la protección de sus ciudadanos.