El Ayuntamiento de Zaragoza ha concluido el año 2024 con una deuda total de 571 millones de euros, lo que representa una disminución de 32 millones en comparación con diciembre de 2023.

Este monto incluye la imputación contable del plan de amortización del tranvía, que suma 124 millones de euros y que, de acuerdo con las normativas del Banco de España, debe ser contabilizado de esta manera desde hace algunos años.

Sin considerar este concepto, la deuda real de la ciudad se sitúa en 447 millones de euros.

La ratio de deuda viva sobre ingresos corrientes se ha ubicado en aproximadamente el 71%, lo que implica una reducción significativa, ya que por primera vez desde 1986 se ha logrado bajar del umbral del 75%.

Este límite es crucial, ya que establece que los municipios que lo superan están sujetos a la tutela financiera de la administración autonómica. Desde 2013, todos los ayuntamientos españoles que superan el 75% de ratio de endeudamiento requieren el apoyo de la administración regional para acceder a financiación a largo plazo.

Este avance significa que Zaragoza finalmente ha alcanzado la autonomía financiera en 2025, según lo anunciado por la alcaldesa Natalia Chueca en una conferencia de prensa junto a la consejera de Hacienda y Fondos Europeos, Blanca Solans.

Históricamente, el ratio de endeudamiento en Zaragoza era del 116% en 2019, y ha ido disminuyendo constantemente gracias a las políticas de saneamiento financiero implementadas en los últimos años, que también han permitido ahorrar millones en intereses.

Desde junio de 2019, la deuda municipal se ha reducido en un 31%, pasando de 830 millones a los actuales 571 millones de euros, lo que representa un alivio de 259 millones para las finanzas municipales.

En términos de deuda por habitante, el alivio registrado en el último año asciende a 48 euros, y comparado con junio de 2019, ya se traduce en 376 euros por cada residente en Zaragoza.

El gobierno municipal ha logrado combinar su compromiso con la mejora de las finanzas de la ciudad con un aumento en la inversión, propiciando la realización de proyectos que habían quedado estancados durante años y estableciendo un presupuesto récord para políticas sociales que buscan proteger a la población más vulnerable.

En cuanto al ahorro en intereses, para el año 2025 se prevé un ahorro de 9,2 millones de euros. Este recorte en gastos es el resultado de una notable reestructuración financiera, que ha buscado disminuir los costos de intereses que históricamente han afectado la capacidad de inversión del Ayuntamiento.

En el Presupuesto Municipal de 2025, este ahorro se debe, en gran parte, a cuatro operaciones de refinanciación realizadas en el último año y medio, que han permitido cancelar préstamos adquiridos en condiciones desfavorables entre 2005 y 2008, sustituyéndolos por otros con tasas de interés mucho más competitivas.

Estos préstamos anteriores habían generado sobrecostes que acumulaban más de 25 millones de euros en las últimas dos décadas. Así, Zaragoza da un paso firme hacia una gestión financiera más saludable y sostenible.