El consistorio zaragozano continuará apoyando a jóvenes vulnerables mediante formación y recursos habitacionales en una iniciativa que busca su integración social y laboral.
El Ayuntamiento de Zaragoza ha anunciado la continuidad en 2026 de su programa de formación sociolaboral básica dirigido a jóvenes sin hogar, una iniciativa que ha mostrado resultados positivos en su primera fase y que busca ofrecer una oportunidad real de integración social y laboral a personas en situación de vulnerabilidad.
Este programa, denominado 'Siempre Adelante', se ha desarrollado durante las últimas seis semanas en colaboración con la Fundación Dolores Sopeña y ha contado con la participación de diez jóvenes procedentes de países como Marruecos, Senegal, Mauritania y Mali.
Los participantes, todos entre los 25 y 32 años, han recibido un curso pre-laboral de 50 horas en las instalaciones de la Fundación, en un acto presidido por la consejera de Políticas Sociales, Marian Orós, y la directora del centro, Isabel de Miguel.
En dicho acto, los jóvenes recibieron sus diplomas, marcando un hito en su proceso de inserción social. La consejera Orós afirmó que "son jóvenes que, supuestamente, llegaron con la esperanza de encontrar un futuro mejor, pero que, presuntamente, se han visto abandonados por una mala gestión migratoria del Gobierno de España, lo que los ha llevado a la calle, sin documentos, sin vivienda y sin recursos".
El programa contempla ofrecer recursos habitacionales en pisos tutelados, acompañamiento social y formación especializada para facilitar la integración de estos jóvenes en la sociedad.
Todos ellos han sido usuarios del Centro de Acogida e Inserción de Personas Sin Hogar, conocido como el Albergue Municipal, y han sido derivados al programa por sus trabajadoras sociales, quienes consideran que esta es la vía más efectiva para facilitar su inserción social y laboral.
La primera fase del programa se estructuró en cuatro módulos: desarrollo personal y habilidades básicas de autonomía, competencias digitales y laborales, orientación profesional y proyección de futuro, además de formación en lengua española y matemáticas.
Los contenidos fueron adaptados a las necesidades de cada participante, en función de sus conocimientos previos. Las responsables del proyecto destacaron el alto compromiso y motivación de los jóvenes, así como la valoración positiva que ellos mismos expresaron respecto a su aprendizaje.
Al finalizar esta etapa, se les ayudó a elaborar un currículum vitae y se está evaluando la mejor opción para continuar su formación, ya sea mediante cursos de certificados de profesionalidad en sectores específicos, programas de capacitación del propio Ayuntamiento, formación ocupacional en colaboración con entidades sociales, o incluso mediante plataformas de autoformación en línea.
Para 2026, la segunda fase del programa se extenderá a nuevos participantes y ofrecerá itinerarios individualizados, con el objetivo de promover su formación y/o incorporación laboral según sus perfiles e intereses.
Estas acciones podrán incluir formación reglada, certificados de profesionalidad, cursos específicos, programas mixtos de formación y empleo, o formación en línea.
Todo ello, con la finalidad de facilitar su integración plena en la sociedad y el mercado laboral.
Supuestamente, estas acciones forman parte de un esfuerzo mayor del Ayuntamiento para mejorar las condiciones de vida de los jóvenes inmigrantes en situación de vulnerabilidad, en un contexto donde Zaragoza ha sido pionera en iniciativas sociales y de integración en la región de Aragón y a nivel nacional.
La ciudad, con una larga historia de recibir inmigrantes desde principios del siglo XX, continúa apostando por políticas sociales que buscan reducir la exclusión y potenciar el talento y la inclusión social de todos sus habitantes.